Gracias a un estudio en Bruselas, Bélgica, han logrado fabricar una silla comprimida de espuma que, al meterla en un horno y calentarla, aumenta su tamaño hasta alcanzar un tamaño práctico.

 

El diseñador del objeto, Carl de Smet, señaló que la idea es que se pueda adquirir en cualquier tienda local. Dijo que es un pequeño paquete que pones bajo tu brazo y lo llevas a casa porque es muy ligero.

 

De Smet junto a su equipo del estudio Noumenon están probando diversos usos de espuma con memoria de nombre Shape Memory Polyurethane (SMPU).

 

El material del que está hecho la silla es el resultado de los experimentos que han realizado los científicos, usando metales con memoria de formas. La silla soporta un peso de 40 kilos, equivalente al peso de un niño.

 

Hasta ahora, éste producto comienza a expandirse a una temperatura de 70 grados C, pero De Smelt y su equipo trabajan en un prototipo que pueda ensancharse con 35 grados C.

 

Los creadores belgas siguen buscando la manera para que la silla se ensanche con tan sólo una conexión a la red eléctrica.