GINEBRA. La propagación del virus H7N9 aumenta su velocidad en China. Aunque las muertes se mantienen en un promedio de 1 o 2 por día, los nuevos casos de contagio se acrecientan. Además el misterio y la preocupación se elevan luego de que la Organización Mundial para la Salud haya confirmado que muchos de los infectados no han tenido contacto con aves.

 

Miles de aves han sido sacrificadas con el objetivo de contener la infección, pero la duda sobre si la infección se transmite entres personas está en el aire.

 

“Hay gente sin historial de contacto con aves de corral”, informó el portavoz de la OMS, Gregory Hartl.

 

Un informe de la Comisión Nacional de Salud reconoció que “como el origen de la infección no ha sido controlada, es posible que el número de enfermos continúe creciendo”.

 

El gobierno chino ha invitado a científicos extranjeros a las zonas más afectadas del país para agilizar la investigación.

 

La amenaza de una posible mutación del virus, que podría otorgarle la capacidad para transmitirse entre humanos, es la mayor preocupación de los expertos.

 

Alrededor de mil personas que han tenido contacto con infectados son monitoreadas, sin embargo la OMS niega ya haya ocurrido dicha mutación.

 

Zeng Guang, científico a cargo de la pandemia en el Centro de Prevención y Control de Enfermedades de China, dio a conocer que el 40% de los enfermos no han contacto con aves. (Con información de El País)