El Parlamento británico votará el 27 de octubre una iniciativa en la que pide la celebración de un referéndum para debatir sobre la permanencia del Reino Unido en la Unión Europea (UE). La propuesta fue presentada por el diputado conservador David Nuttal, quien plantea la realización de un plebiscito para mayo de 2013 en el que se les daría a los votantes tres opciones: que el Reino Unido permanezca en la UE como hasta ahora, abandonarla o negociar los términos en los que puede continuar.

 

El resultado de la votación en la Cámara de los Comunes no es vinculante para el Gobierno, pero el resultado puede resultar no ideal para David Cameron, que, aunque rechaza la celebración de un referéndum, es algo que defienden muchos diputados de su partido.

 

Cameron mantiene una postura en contra del euro, ya que el Reino Unido no forma parte de la Unión Europea,  pero más del 60% de las exportaciones que realiza van destinadas a países que tienen como moneda al euro.  El primer ministro señaló en el cierre del Congreso Anual del Partido Conservador que “La zona del euro está en crisis. Francia y Alemania han reducido sus economías hasta casi paralizarlas. Es un momento de mucha ansiedad; este país [Reino Unido] nunca se incorporará al euro”.