El presidente estadunidense Barack Obama aseguró que su nación apoya el nuevo enfoque que el gobierno del presidente Enrique Peña Nieto ha establecido en el tema de la seguridad.
Pidió sin embargo no perder de vista que entre México y Estados Unidos hay una relación más amplia en la que puede haber mayor cooperación en comercio, y ofreció que su país será un fuerte socio “pues cuando prospera uno de nosotros prosperamos los dos”.
En una conferencia de prensa conjunta con el mandatario mexicano Enrique Peña Nieto, Obama agradeció en español el extraordinario recibimiento que se la ha dado en tierras mexicanas y confirmó que habrá un mayor acercamiento en materia educativa.
El mandatario estadunidense llamó a enfocarse en aprovechar las oportunidades en comercio y economía, pues reiteró que cuando prospera Estados Unidos a México le va bien y viceversa.
Desde el Salón Tesorería de Palacio Nacional, también exhortó a aprovechar las oportunidades que surjan en el mundo, pues “cuando la economía va creciendo, cuando la gente tiene oportunidades, entonces muchos de los otros problemas se resuelven”.
Palabras íntegras de Barack Obama tras reunión con Peña Nieto:
Muchas gracias señor Presidente.
(Interpretación al Español)
Al Presidente Peña Nieto le agradezco sus amables palabras y su extraordinaria hospitalidad.
Como Presidente electo fue el primer líder que yo recibí en la Casa Blanca, luego de la elección. Fue una señal de nuestra relación extremadamente estrecha entre nuestras dos naciones.
Durante la visita de Enrique noté que como estudiante estuvo en uno de nuestros estados más lindos, Maine. Es un estado muy frío, así que cuando vengo aquí, en un día de primavera hermoso, en esta hermosa ciudad, entiendo por qué regresó de Maine.
Quiero agradecerle su hospitalidad. Será un placer estar con usted y con la Primera Dama, la señora Rivera, esta noche.
Y quiero darle las gracias a todo el pueblo de México por su tan amable acogida. Siempre es un placer estar aquí.
Como mencionaba el Presidente Peña Nieto, entre nuestros dos países tenemos 430 millones de personas. Decenas de millones de mexicano-americanos enriquecen la vida de los Estados Unidos de América. Más de un millón de estadounidenses viven en México.
Y todos los años, miles y miles de turistas, la mayoría de Estados Unidos, visitan a México, este maravilloso país.
Y todos los días, trabajadores mexicanos trabajan gracias a puestos de trabajo creados por nuestro comercio. Hay un activo movimiento entre nuestras fronteras de trabajadores, investigadores, científicos, docentes.
De modo que nuestros países tienen una de las relaciones más dinámicas del mundo, pero no siempre oímos acerca de todos los aspectos de estos lazos extraordinarios, porque demasiadas veces hay otros temas que tienen la atención pública, como seguridad y migración que, evidentemente, son temas muy serios y desafiantes, y el Presidente y yo hemos hablado de ellos hoy.
Acordé seguir con nuestra estrecha cooperación sobre la seguridad. Si bien va a seguir evolucionando esa cooperación, como le dije al Presidente, será decisión del pueblo mexicano decidir cuáles serán sus estructuras de seguridad y cómo entablar con otros países, como los Estados Unidos.
Pero lo que le dije al Presidente es que apoyamos el trabajo de México por reducir la violencia y queremos seguir nuestros buenos oficios en cooperar de la forma que ellos crean apropiada.
También, reafirmé nuestra decisión en los Estados Unidos de cumplir con nuestra responsabilidad de reducir la demanda de drogas ilegales y de combatir el flujo ilegal de armas y efectivo al sur que ayudan a financiar la violencia.
Quiero rendirle homenaje al pueblo mexicano que ha ofrecido enormes sacrificios y demuestran una enorme valentía todos los días.
Pero al seguir trabajando en estos desafíos urgentes, no podemos perder de vista la relación mayor de nuestros países. Entre ellos, la promesa futura económica de México.
Creo que tenemos una enorme oportunidad de auspiciar más comercio, más puestos de trabajo, más tráfico entre nuestros países.
Tenemos una de las relaciones económicas más grandes del mundo. Nuestro comercio anual es de más de 500 mil millones de dólares; más de mil millones de dólares diarios.
Somos el cliente más importante de México, comprando la gran mayoría de sus exportaciones, y México es el segundo mercado para las exportaciones estadounidenses.
Así que, todos los días nuestras empresas, nuestros trabajadores con sus cadenas, están comprando y construyendo productos juntos. Y podemos seguir construyendo en base a eso.
Quiero felicitar al Presidente y al pueblo mexicano por sus ambiciosas reformas para que su economía sea más competitiva, para que sus instituciones sean más efectivas, y sé que es difícil, pero también es necesario.
A la postre, solamente los mexicanos decidirán cómo hacer sus reformas. Pero como le dije al Presidente, al tratar de ser más competitivo México, tienen un socio firme en los Estados Unidos, porque nuestro éxito será compartido. Cuando uno prospera, lo hace el otro. Y es el contexto para el progreso que logramos hoy.
Como mencionaba el Presidente. Primero, estamos tratando de crear un diálogo de alto nivel para profundizar nuestra relación económica.
En los Estados Unidos será liderado por miembros de mi Gabinete, el Vicepresidente Biden participará, también.
Y junto con México, nos centraremos en aumentar las interconexiones comerciales y obreras, promoviendo la innovación, el trabajo empresario, para aumentar la competitividad.
Y, también, reafirmamos nuestro objetivo de concluir negociaciones en la Asociación Transpacífica este año que será otro paso importantísimo para integrar nuestras economías y colocarnos en posición de competir en los mercados más acelerados del mundo, en Asia para poder vender más productos mexicanos y estadounidenses. Y, si lo hacemos juntos, podemos trabajar aún mejor.
Acordamos seguir haciendo de nuestra frontera algo más eficiente, con más infraestructura, mejores tecnologías para que sea más fácil comerciar juntos.
Reafirmamos nuestra dedicación a las asociaciones de energía limpia para combatir el cambio climático.
Y me complace que hemos acordado expandir las colaboraciones y los intercambios estudiantiles, escolares y universitarios.
Así como Enrique estudió en nuestro país, queremos que más mexicanos vengan a los Estados Unidos. Y queremos que más estadounidenses vengan a estudiar a México.
Y vamos a centrarnos en la ciencia, la tecnología, la ingeniería, las matemáticas, para ayudar a nuestros jóvenes, incluso a nuestras hijas a tener éxito en esta economía global.
Y, por último. Le hablé al Presidente de nuestros esfuerzos en Estados Unidos por lograr una reforma migratoria integral para cumplir con nuestro futuro de país migratorio.
Al hacerlo, creo que es importante que todos recuerden que nuestra frontera compartida es más segura que nunca jamás.
Los intentos ilegales de inmigración han bajado muchísimo, son los más bajos en décadas, y la frontera es cada vez más firme, más fuerte y más competitiva.
Y esto ofrece mayores oportunidades en México. Creo que este progreso debería informar el debate en los Estados Unidos.
Y me siento optimista con respecto a lograr esa aprobación legislativa, en cuanto a la reforma migratoria.
Voy a hablar de más temas como éste en mi discurso mañana. Pero ahora quiero expresarle mi agradecimiento al Presidente por su hospitalidad y, también, por su liderazgo.
Y debido al progreso que vemos aquí, en México, veo tantas oportunidades para seguir arraigando la enorme amistad y el lazo común que compartimos entre nuestras dos grandes naciones y nuestros dos grandes pueblos.
Sé que lo haremos.
Muchísimas gracias.