WASHINGTON. A sólo un día de que el jefe de la Fuerza Aérea de Prevención del Asalto Sexual fuera arrestado por asalto sexual, surge un nuevo informe del Pentágono que muestra un fuerte aumento de 37% en el número de agresiones sexuales en el ejército en el último año.
El informe del Departamento de Prevención de Asalto Sexual de la Oficina de Defensa y para el Año Fiscal 2012 mostró un aumento de 6% en asaltos reportados en el último año, dando un total de 3 mil 374. Pero mucho más preocupante es el número estimado de casos de agresión sexual que nunca se informó oficialmente. En el informe del año pasado, había un estimado de 19 mil casos, pero este año el número ha aumentado a un récord de 26 mil casos de asalto, sin sumar los miles de casos no reportados.
La disparidad en el número total de casos de Trauma Sexual Militar (MST), en comparación con aquellos plenamente reportados -donde la víctima rellena un informe oficial y se toman medidas- puede ser visto como resultado de los temores de las víctimas a represalias, incluido el posible retiro del servicio militar o ser pasado por alto para un ascenso. Según dicho informe, las mujeres del servicio militar están ahora más dispuestas a denunciar el abuso sexual, con aproximadamente una de cada cinco mujeres diciendo que fueron víctimas de contacto sexual no deseado por parte de otro miembro de las fuerzas armadas.
“El asalto sexual no tiene lugar en el ejército de Estados Unidos”, dijo el portavoz del Pentágono George Little en un comunicado difundido la noche del lunes en respuesta a las noticias de que el teniente coronel Jeff Krusinski, jefe de prevención de asalto sexual de la Fuerza Aérea, había sido arrestado por cargos de asalto sexual. “El pueblo estadunidense, incluyendo a nuestros miembros del servicio, deben esperar una cultura de absolutamente ninguna tolerancia para este comportamiento deplorable que no sólo viola la ley, sino los principios básicos del respeto, el honor y la dignidad de nuestra sociedad y de sus fuerzas armadas”.
A pesar de esta declaración, el abuso sexual en el ejército ha estado bajo creciente escrutinio en los últimos meses, tras una serie de escándalos de alto perfil. En febrero, el teniente coronel James Wilkerson fue reincorporado al servicio después de que un general de la Fuerza Aérea anuló un jurado, desechando la convicción de asalto sexual de Wilkerson. En 2012, la Base Aérea Lackland vio 12 instructores investigados por mala conducta sexual hacia 31 miembros bajo entrenamiento, con al menos un instructor sentenciado a 20 años por violación y abuso sexual. El general del ejército Jeffrey Sinclair fue igualmente acusado en 2012 de agredir sexualmente a una mujer subordinada, a continuación, para después amenazar la carrera de la víctima si hacía pública la agresión.
Descartada como directora de la CIA
WASHINGTON. Una de las mujeres de mayor rango en la CIA, que en el pasado dirigió una prisión de la agencia en Tailandia donde los sospechosos de terrorismo eran sometidos a la práctica de asfixia simulada conocida como “el submarino”, fue descartada para dirigir la agencia de espionaje.
La funcionaria, que opera de manera encubierta, estaba entre los candidatos finalistas para el cargo. Como una de las últimas agentes de la CIA que tenía papel ejecutivo en el programa de detención e interrogación era, sin embargo, una candidata políticamente riesgosa.
La senadora Dianne Feinstein, demócrata de mayor rango en el Comité de Inteligencia del Senado, ha criticado el programa de interrogación y ha cuestionado su supuesto éxito en un informe secreto de seis mil páginas. Instó personalmente al director de la CIA, John Brennan, a no promover a la mujer, según un ex analista prominente.
La agente dirigió brevemente una prisión secreta de la CIA en Tailandia, donde los acusados de terroristas Abu Zubayada y Abd al-Nashiri fueron sometidos a dicha práctica en el 2002, según agentes de inteligencia actuales y pasados. También fue directiva del Centro de Contraterrorismo que contribuyó a la guerra contra el terrorismo.