Arlene Castro, hija del hombre que mantuvo a tres mujeres secuestradas durante diez años, Ariel Castro, se dijo profundamente decepcionada y avergonzada por el comportamiento de su padre.

 

En entrevista con la cadena ABC, la hija del secuestrador de origen puertoriqueño aseguró que tenía una relación lejana con su padre y que apenas sostenían conversaciones cortas.

 

Por otra parte extendió sus disculpas las mujeres liberadas, en especial a Gina DeJesús, quien había sido su mejor amiga antes del plagio.