Amnistía Internacional emitió una acción urgente para que organizaciones civiles y ciudadanía envíen llamamientos a la Secretaría de Gobernación y al Gobierno de Oaxaca, a fin de garantizar la seguridad de las defensoras de Derechos Humanos, Alba Cruz Ramos y Susana Ramírez, que son hostigadas y amenazadas por su trabajo a favor de los pueblos indígenas y en contra de los proyectos eólicos en el Istmo de Tehuantepec, Oaxaca.

 

De acuerdo con infamación de AI, el pasado 30 de abril, la coordinadora de Código -DH, Alba Cruz, recibió un mensaje en su teléfono celular que en el cual la amenazaban. Desde el 2007 la activista cuenta con medidas cautelares ordenadas por la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, para proporcionarle protección debido a las constantes amenazas que recibe.

 

Por otra parte, Amnistía Internacional recodó que Susana Martínez fue detenida durante 34 horas en la capital de Oaxaca por documentar las protestas del 1 de Mayo, el Comité de Defensa Integral de Derechos Humanos Gobixha A. C. (Código DH) cree que esta detención es represalia a su activismo ya que no formó parte de los enfrentamientos entre los manifestantes y policías y aún así fue detenida.

 

El tres de marzo se descubrió que las oficinas de la Código-DH fueron asaltadas; hacían falta documentos, además de que una de las computadoras estaba encendida. Se presentó una denuncia formal ante la Procuraduría de Justicia del Estado de Oaxaca. Recientemente esta organización ha representado a comunidades que hacen campaña en contra del proyecto para construir un parque eólico en el istmo de Tehuantepec.

 

Amnistía Internacional pidió que las comunidades exijan a las autoridades de Oaxaca que ordene una investigación exhaustiva, inmediata e imparcial sobre las amenazas recibidas por Alba Cruz y así detener a los responsables.