El gobierno de México eliminó temporalmente los aranceles a la importación de tomate verde y limón y abrió un cupo sin arancel para la compra de pollo en el exterior a fin de bajar los precios domésticos, según un decreto publicado el miércoles en el Diario Oficial de la Federación (DOF).
La medida de suprimir la tarifa del 20% para el limón y del 10% para el tomate busca contener la escalada en sus precios, así como sus presiones sobre la inflación, derivada de condiciones climáticas y sanitarias adversas, que incluyen heladas y plagas.
Según versiones de prensa, el cupo para la importación de pollo sin arancel es de 300 millones de toneladas destinadas a cubrir la demanda interna, en momentos en que la producción de ese rubro ha sido afectada por un brote de influenza aviar que provocó el sacrificio de millones de gallinas.
“Es necesario establecer medidas con el objeto de ampliar su oferta a la población, mediante el acceso a productos disponibles en los mercados internacionales”, señala el decreto refiriéndose a los aranceles del tomate y el limón, alimentos clave en la dieta de los mexicanos.