La Duma o cámara de diputados de Rusia prohibirá por ley la adopción de niños rusos por parte de hombres y mujeres solteros procedentes de los países donde está permitido el matrimonio homosexual, así como para parejas gay..

 

Según una ley aprobada hoy en segunda lectura, no podrán adoptar niños rusos ni las parejas homosexuales ni los extranjeros que no presenten un certificado de matrimonio heterosexual, informaron las agencias locales.

 

“La tercera lectura está prevista para el viernes”, aseguró Olga Batálina, vicepresidenta del comité parlamentario de Familia, Mujeres e Infancia.

 

Con ocasión de la reciente cumbre Rusia-Unión Europea, el presidente de Rusia, Vladímir Putin, impulsor de la iniciativa legal, ya adelantó que promulgaría dicha prohibición si la Duma le presentaba el correspondiente proyecto de ley.

 

“Si el Parlamento ratifica esa ley, la firmaré. Me tienen harto con esas parejas homosexuales. Hay que mostrar menos agresividad y no inflar el problema. Así será mejor para todos”, dijo.

 

Además, la nueva ley simplificará el procedimiento de adopciones al rebajar de 30 a 10 días el plazo de entrada en vigor de la decisión judicial y reducirá el número de enfermedades que impiden a una pareja adoptar un niño.

 

Y se incrementará de 400 dólares a  3 mil 120 dólares el subsidio por cada niño que el Estado concederá a las familias que acojan huérfanos inválidos o mayores de siete años.

 

La pasada semana Rusia advirtió de que, antes de firmar nuevos acuerdos bilaterales de adopción con ciertos países, tendrá en cuenta si estos han aprobado por ley el matrimonio homosexual.

 

En concreto España, tercer país que adopta más niños rusos tras Italia y Estados Unidos, y donde están permitidas las uniones homosexuales, lleva desde el pasado año negociando la firma de un acuerdo bilateral.

 

A su vez, el Gobierno ruso se propone retirar la licencia a las agencias de adopción internacional que formalicen la acogida de un menor ruso por parte de una familia homosexual o de personas con una “orientación sexual no tradicional”.

 

Rusia aprobó la pasada semana una controvertida ley que prohíbe la propaganda homosexual entre los menores de edad, que este colectivo considera que es una excusa para impedir la celebración de las marchas de orgullo gay.