WASHINGTON.- Tras su salida furtiva de Hong Kong, un día antes, ayer persistía el misterio sobre el paradero de Edward Snowden, el ex técnico de la Agencia Central de Inteligencia (CIA) que hizo públicos los programas de vigilancia del gobierno estadunidense que recopilan los registros de las telecomunicaciones de sus ciudadanos y extranjeros. Este hombre, convertido en fugitivo de la justicia tras evadir la orden de extradición de Estados Unidos en la ex colonia británica, busca refugio y asilo para escapar de su perseguidor.
Es previsible que el caso Snowden impacte profundamente en las relaciones de Washington con la República Popular China, bajo cuyo dominio está el territorio autónomo de Hong Kong adonde residió por casi un mes Edward Snowden antes de fugarse el domingo, así como con la Federación Rusa que recibió al prófugo y cuyo paradero deben conocer las autoridades policiales.
Así lo expresó desde Nueva Delhi el secretario de Estado norteamericano, John Kerry, cuando expresó que sería "profundamente perturbador" que Rusia o Hong Kong hayan tenido noticia anticipada sobre los planes de Edward Snowden de huir a un país que le concediera asilo y que aun así lo dejaran salir.
Entretanto, tras admitir que la fuga de Snowden cimbró su expectativa por llevarlo ante la Justicia, el Departamento de Estado anuncia que ha contactado al gobierno de Ecuador y a “varios países que son destino potencial” del informante, como Cuba. Ese propósito también se extiende a los países que Edward Snowden podría utilizar como tránsito antes de acceder a su destino final donde obtendrá asilo.
“Buscamos a Snowden por cargos de un delito penal en Estados Unidos y queremos que sea devuelto a Estados Unidos para que se enfrente a la Justicia", indicó el Departamento de Estado ayer lunes. Esa declaración sigue a la expresión del fin de semana del secretario John Kerry cuando aseguró que el trabajador de la contratista Booz Allen Hamilton es un “traidor”.
El fin de semana pasado, cuando Washington emitió la orden para extraditar desde Hong Kong al informante, se precipitaron los acontecimientos. En principio, la orden se expidió por tres delitos: espionaje, robo y uso indebido de bienes del Estado y que por cada uno implican penas de hasta diez años de prisión. Enseguida, el gobierno estadunidense canceló el pasaporte de Snowden, pues buscaba bloquear toda posibilidad de tránsito hacia un país con el que Washington no mantuviera relaciones.
Pese al bloqueo de su documento migratorio, Snowden evadió la orden de extradición en su contra cuando luego de un mes de permanencia en Hong Kong salió de ahí la mañana del domingo. Las circunstancias de esa fuga desconciertan a abogados que esperaban una intensa batalla en las cortes de la región semiautónoma de China. Sin embargo, todo parece indicar que el ex técnico usó su propio pasaporte y abordó el vuelo de Aeroflot con destino a Moscú.
Aunque se estimaba que una vez en territorio ruso Snowden descansaría unas horas para proseguir camino a América Latina al día siguiente, su rastro se perdió. El lunes ni el Departamento de Estado con todo su aparato diplomático ni los corresponsales de la prensa mundial daban con su paradero.
Entonces, Washington desplegó toda su capacidad diplomática para presionar políticamente a los posibles refugios de Snowden. Mientras eso ocurría el mandatario de Ecuador, Rafael Correa, afirmaba que su gobierno decidirá con “absoluta soberanía” sobre la solicitud de asilo que le formuló el prófugo más buscado en la actualidad. “Hola país y el mundo. Para variar, otra semana complicada. Tengan la seguridad de que analizaremos muy responsablemente el caso Snowden y tomaremos con absoluta soberanía la decisión que creamos más adecuada".
El factor Assange
En la carta de petición de asilo de Snowden que leyó Correa, aquel revela su temor de ser "juzgado y ejecutado" si es procesado en Estados Unidos por espionaje. Con su petición de asilo el ex trabajador de la Agencia de Seguridad Nacional (ASN) sigue los pasos del fundador de WikiLeaks, Julian Assange, quien hace más de un año está bajo protección de ese país en la embajada ecuatoriana en Londres para evitar su extradición a Suecia por supuestos delitos sexuales.
Precisamente Assange anunció el lunes que Edward Snowden recibió del gobierno de Ecuador un documento de refugiado para poder viajar dado que Estados Unidos ha revocado su pasaporte. En una conferencia de prensa por vía telefónica, Assange explicó que Snowden está "sano y salvo", que su destino es Ecuador a través de una ruta "segura" y que WikiLeaks buscando también otras opciones de asilo para el joven en Islandia y otros países.
Assange, también especialista en informática, declaró que "desafortunadamente no podemos decir en qué país se encuentra" Snowden aunque afirmó que está en un lugar seguro y que instruyó a su organización para que asistan al fugitivo en sus necesidades, como los costos de viaje y alojamiento desde que dejó Hong Kong y que ha cubierto WikiLeaks.
El actual escenario es impensable para el país con el sistema de inteligencia más completo del planeta: que el secretario de Estado admitiera el lunes “no sabemos específicamente dónde podría dirigirse ni cuál sería el destino final” de Edward Snowden refleja que el técnico burló al país con la mayor estructura de inteligencia del planeta. Ese es el gran desafío que representa ahora Edward Snowden para Estados Unidos.