El comisionado del Instituto Nacional de Migración (INM), Salvador Beltrán, desmintió que fuerzas federales desalojaran de manera violenta a 71 guatemaltecos asentados en una propiedad ejidal de Nuevo Progreso, municipio Tenosique, Tabasco, ya que en todo momento se preservaron sus derechos humanos.

 

Beltrán del Río dijo que el Gobierno Federal actúo por razones humanitarias en el rescate de las familias guatemaltecas ubicadas en el municipio tabasqueño desde el 23 de agosto, tras ser desalojadas por la Policía Nacional Civil de su país al estar asentadas en la zona natural protegida de la Sierra del Lacandón.

 

En entrevista con Notimex informó que el organismo, dependiente de la Secretaría de Gobernación (Segob), prepara un informe detallado de la revisión migratoria que se hizo la víspera a los nacionales chapines, antes de ser trasladados a la Estación Migratoria de Tapachula, Chiapas, donde se encuentran.

 

“Es falso (el desalojo), fue una revisión migratoria que se realizó para definir su estatus migratorio en nuestro país. Ya se les había invitado anteriormente, personalmente lo hice el 22 de diciembre y el pasado 3 de enero volví con el jefe de la Unidad de Gobierno de la Segob, a conminarlos a que regresen a Guatemala”, explicó.

 

Dijo que el grupo compuesto por 15 hombres, 11 mujeres, así como 45 menores de edad, de los cuales 30 son varones y 15 mujeres, se encontraba en condiciones insalubres, en completo abandono y sin acceso a servicios básicos como agua, drenaje y luz, así como carentes de su calidad migratoria vigente.

 

Detalló que los guatemaltecos tenían incluso el ofrecimiento de su gobierno de que se fueran temporalmente a un albergue en una localidad ubicada en La Libertad, en un poblado denominado San Francisco.

 

Beltrán del Río aclaró que durante la revisión migratoria el grupo abordó los autobuses para ser trasladados a Tapachula, y en todo momento se cuidaron sus derechos humanos y el no separar a los integrantes de una familia, al recordar que la repatriación debe ser voluntaria, no forzada.

 

“Nosotros no podemos obligar a una persona a ser repatriada, eso debe ser voluntario, sobre todo con niños y mujeres, eso es absolutamente falso”, recalcó.

 

Refirió que durante la revisión migratoria estuvo presente la Policía Federal “sin una sola arma”, además participaron oficiales de Protección a la Infancia de los cuales la mayoría eran mujeres.

 

También participó personal del Sistema Nacional para el Desarrollo Integral de la Familia (DIF) y de la Comisión Nacional para Prevenir y Erradicar la Violencia contra las Mujeres, entre otros organismos.

 

Salvador Beltrán aceptó que durante la revisión entre 20 y 30 chapines optaron por cruzar hacia su país, “pero nosotros no podíamos, ni nosotros ni nadie, ni la Policía Federal, actuar en terreno guatemalteco, definitivamente”.

 

Precisó que se llevan a cabo las actuaciones migratorias para conocer sus datos generales y si van a solicitar refugio o desean ser repatriados a su país de origen.

El gobierno guatemalteco ha solicitado formalmente que en caso de haber repatriaciones éstas se lleven a cabo por Tecun Umán, porque ahí hay más personal e infraestructura y no por Talismán.

Respecto al llamado de diversas organizaciones de derechos humanos sobre los acontecimientos, el comisionado agregó que “seguramente están mal informados, dado que las cosas no ocurrieron como ellos aseguran”.