MADRID. Al menos 21 personas resultaron heridas, una de ellas por asta de toro, en el séptimo y penúltimo encierro, que fue dramático, de las Fiestas de San Fermín, tras un tapón humano de numerosos mozos, lo que no se había visto en muchos años.
El encierro duró 4 minutos y 15 segundos pero un gigantesco montón se formó justo en la puerta de acceso al ruedo, lo que impidió que pudieran entrar los toros de la ganadería de Fuente Ymbro.
Decenas de mozos, además de los toros y cabestros quedaron agolpados en el montón, lo que causó aplastamientos y desvanecimientos, en medio de escenas de pánico y angustia.
Medios españoles destacaron que en la historia de esta fiesta tradicional se han producido por lo menos 22 tapones similares, aunque no se recordaba nada similar desde los años 70.
Este sábado, la carrera empezó con normalidad pero un gigantesco montón se formó justo en la puerta de acceso al ruedo, lo que impidió que pudieran entrar los toros y cabestros que llegaron a toda velocidad.
Algunos mozos trataron de deshacer el montón desde el interior de la plaza, mientras que los astados, sorprendidos y asustados también, buscaban un hueco entre el tapón humano aunque sin lanzar cornadas a los corredores.
Varios toros cansados de empujar sin éxito al montón optaron por volver hacia la calle, aunque la decisión de cerrar la puerta impidió que llegaran a la gente que tranquilamente se dispersaba.
Mientras el montón continuaba, un corredor optó por entrar en la plaza reptando entre las cabezas de los jóvenes atrapados, haciendo lo mismo dos cabestros que saltaron por encima de los corredores pisoteando a algunos mozos.
La mayoría de las 21 personas trasladadas a hospitales sufrieron aplastamientos torácicos, y dos sí sufrieron cornadas, en axila y glúteo.