El doctor Marcus Setchell, de casi 70 años, es el ginecólogo de la Reina Isabel II, quien hace unos meses se enteró de que tendría que posponer su jubilación hasta que el primogénito de los Duques de Cambridge naciera. Debido a la confianza y el consejo de la Reina, será él el encargado de traer al mundo al número tres en la sucesión al trono británico.
Setchell no es solo un doctor de confianza de las mujeres de la Casa Real Británica, puesto que este cirujano atiende a la Reina desde 1990 e incluso fue nombrado Comendador de la Real Orden Victoriana por sus servicios, sino que también ha atendido otros casos como la cesárea de urgencia que le practicó a Sofía de Wessex en el nacimiento de Luisa Windsor, la asistencia en el parto de su hermano Jacobo, o la histerectomía a la que se sometió la duquesa de Cornualles.
Asimismo, fue él quien atendió a la Duquesa de Cambridge durante los difíciles comienzos de su embarazo, cuando padeció una hiperméresis gravídica que provocó que la ingresaran en el hospital unos días. A la hora del nacimiento, será asistido por Alan Farthing, obstetra y ginecólogo de la Reina desde 2008, conocido además por ser el prometido de la presentadora de la BBC Jill Dando, asesinada en 1999.
De acuerdo a la revista People el médico real, que se formó en la Universidad de Cambridge y en la Escuela de Medicina de St. Bartholomew de Londres, tiene algunas aficiones en común con Catalina de Cambridge como el arte, el tenis o la vela, lo que garantizaría la afinidad y buena sintonía entre ambos.
Aunque ya se anunció que se retiraría cuando el primogénito de los duques de Cambridge llegara al mundo, fuentes cercanas al ginecólogo señalaron al periódico Mirror que este tendría que interrumpir su descanso en caso de que la pareja decidiese tener más descendencia.
Con información de ABC