Ni Messi ni el debut del brasileño Neymar, que finalmente no coincidió con el argentino en el terreno de juego, fueron suficientes para superar al Legia Gdansk polaco, que con rápidos contraataques logró un empate (2-2) ante un Barça que poco tuvo que ver con el que goleaba días atrás en Oslo.
Si por algo será recordado el amistoso que hoy disputó el Barcelona es por el debut de su gran fichaje de la temporada, el carioca Neymar, quien sólo disponía de poco más de diez minutos para intentar demostrar el talento que le ha traído a la ciudad condal, aunque acabó frenado por la contundente defensa del Legia.
En lo demás un Barça plagado de reservas no fue capaz de imponerse al conjunto polaco, que incluso tuvo la oportunidad de marcar su tercer gol en los últimos compases del encuentro.
Los locales salían al campo muy concentrados, y en los primeros minutos lograban adelantarse con un gol del central Bieniuk tras un potente cabezazo que dejaba en evidencia a la zaga azulgrana.
El 1-0 evidenciaba los problemas del Barça, dirigido hoy por Jordi Roura que en la primera parte lo pasaba mal sin balón mientras el Legia armaba rápidos contraataques.
Pero el gol local también servía para despertar al Barcelona, que sobre todo creó peligro por la banda derecha, con Montoya, Alexis Sánchez y Dos Santos como hombres más destacados.
Precisamente en un centro de Montoya servía para que un veloz Sergi Roberto hiciera el empate instantes después de cumplirse el ecuador de la primera parte, cuando los azulgrana apenas habían disfrutado de un par de buenas oportunidades con el delantero chileno como protagonista.
La segunda parte, además de dejar el esperado debut de Neymar (minuto 78), servía para que el ‘9’ del Legia, el capitán Bieniuk, le robase la cartera a Montoya y marcase un buen gol ante Paredes.
Instantes después, la aparición de Messi lograba el definitivo 2-2 para los culés, con un remate picado del argentino tras una jugada colectiva que culminaba con una buena asistencia de Alexis Sánchez.
Poco después Messi fallaba una clara ocasión a pase de Adriano, alejando la victoria azulgrana en un partido que deja poco más que el debut de Neymar y la entrega de los numerosos aficionados polacos al Barcelona.