Después de cinco días de libertad, Rafael Caro Quintero se convirtió nuevamente en prófugo de la justicia. El gobierno de Estados Unidos lo persigue por traficar marihuana y cocaína a su territorio.

 

El Departamento de Estado de ese país  tuvo que dejar fuera los cargos por el crimen del agente de la DEA Enrique Camarena Salazar “El Kiki”, pero dos imputaciones más por conspiración para poseer y distribuir drogas en California bastaron para que 24 horas después de su liberación se pidiera a México su localización y captura.

 

Apenas ayer un juez federal en México ordenó su detención preliminar con fines de extradición.

 

Caro Quintero abandonó la madrugada del viernes pasado la prisión en Guadalajara luego de que un Tribunal anuló la sentencia de 40 años que se le impuso por homicidio y dejó sin efecto el proceso. Desde entonces se desconoce su paradero, por lo que la policía lo busca de nuevo.

 

Una parte de la familia del capo de 60 años de edad, incluyendo a sus hijos y nietos, viven en localidades del estado de Jalisco.

 

Otra pista para las autoridades, es que el antiguo socio de Caro Quintero y uno de los líderes del Cartel de Sinaloa, Juan José Esparragoza Moreno alias “El Azul”, se mueve según datos de inteligencia entre los estados de Durango, Jalisco y Sinaloa.

 

Autoridades de la Procuraduría General de la República (PGR) indicaron que las distintas fuerzas federales ya trabajan para la ubicación del capo, y también se ha solicitado la colaboración de las procuradurías de los estados en donde se presume que pudiera encontrarse.

 

El expediente revivido en EU

 

El sábado, un día después de que fue liberado en Guadalajara, el gobierno estadunidense envió a México el expediente para solicitar la orden de detención provisional con fines de extradición de Caro Quintero.

 

La petición se sustentó en un proceso penal abierto desde el 1 de diciembre de 1987 en contra del capo en un tribunal de la División Oeste  del Distrito Central de California. Los cargos que se imputan son posesión y distribución de marihuana, cocaína y otras drogas.

 

En dicho expediente también se encontraba acusado Inés Calderón Quintero,  conocido narcotraficante en la década de los ochenta y quien falleció durante un enfrentamiento con la entonces Policía Judicial Federal el 27 de marzo de 1988.

 

Aunque en Estados Unidos Caro Quintero se convirtió en uno de los hombres más buscados por su participación en el homicidio del agente de la DEA Enrique Camarena en 1985, la orden de extradición no podía solicitarse por ese caso, según dijo el martes la PGR, ya que por ese mismo delito se le procesó en México.

 

24 HORAS publicó ayer que el expediente del caso de Camarena en Estados Unidos se encuentra cerrado desde hace poco más de una década, cundo fue archivado por instrucción del juez Edward Rafeedie.

 

No se trata del único proceso abierto en contra de este capo en los Estados Unidos, considerado uno de los tres fundadores del Cártel de Guadalajara.  En una corte de Tucson, Arizona, hay otro expediente más relacionado con nueve cargos por tráfico de marihuana.

 

Ingresaría a cárcel en México

 

Autoridades de la PGR indicaron que en el momento en que se logre la detención de Caro Quintero, este sería recluido en un penal federal en México mientras se resuelve el proceso formal de extradición.

 

En el comunicado difundido ayer, la Procuraduría subrayó que se solicitó a un juez federal la orden de captura a petición de Estados Unidos, pero el proceso para su extradición no terminaría ahí.