El presidente Juan Manuel Santos informó el domingo que instruyó a los negociadores de su gobierno regresar a Cuba y continuar las negociaciones de paz con la guerrilla de las FARC.

 

El gobernante aseguró que “los negociadores de las FARC dieron instrucciones y dijeron -nos informaron- que mañana a las 8 y 30 de la mañana estarían listos a seguir con el proceso. O sea que la pausa que habían decretado ya no se iba realizar”.

 

Por eso, agregó en un acto público en el centro de Bogotá, “después de analizar la situación, les di instrucciones a los negociadores para que se devolvieran (a La Habana) y mañana a las 8 y media de la mañana continuaran” los diálogos.

 

“Hoy estamos ante la mayor posibilidad de paz de toda nuestra historia. Hoy tenemos una oportunidad única para cambiar esa realidad tan triste de este país que se ha desangrado por más de 50 años de conflicto. Si hoy estamos en un proceso de paz, es porque no queremos que más colombianos tengan que sufrir la guerra”, agregó el jefe de Estado.

 

Sostuvo que en el proceso de paz “hemos avanzado bastante, como nunca antes, aunque hay que ser realistas, nos queda mucho trabajo por hacer y por recorrer”.

 

En tanto, Iván Márquez, jefe del equipo negociador de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), dijo el domingo que la paz no debe tener fines electorales y opinó que el próximo presidente de Colombia debe estar comprometido con ella.

 

“Consideramos que la paz debe deslindarse de propósitos electorales”, aseguró Márquez en una entrevista publicada en el diario bogotano El Tiempo.

 

“No nos importa quién sea el presidente (en 2014), sino que triunfe alguien que se la juegue por la paz. Pero además, esta debe ser una política de Estado. La solución a medio siglo de cruenta guerra está por encima de cualquier interés electoral”, agregó Márquez, cuyo verdadero nombre es Luciano Marín Arango.