Gracias al acceso a las bases de datos de la empresa AT&T, la Agencia Antidrogas de Estados Unidos (DEA por sus siglas en inglés) identificó, desde el 2012 en Arizona, los números telefónicos de presuntos narcotraficantes mexicanos, mediante los cuales realizaron decenas de decomisos de kilos de drogas, dinero y armas de alto poder.

 

Se trata de la primera fase de una investigación que los agentes de la DEA realizan, y que se prevé derive en nuevos aseguramientos en la región fronteriza.

 

Los resultados hasta ahora son de más de 45 kilos de metanfetaminas decomisadas, 102 kilos de hachís, 9 kilogramos de cocaína, 190 mil dólares, cinco rifles de asalto, y chalecos antibalas.

 

Los datos de esta operación, y otras consideradas como “casos de éxito”, se encuentran en el documento oficial del denominado “Proyecto Hemisférico”, revelado por el diario estadunidense The New York Times el lunes pasado, y que consiste en una alianza entre la DEA y el gigante telefónico AT&T.

 

A través de esa colaboración, los agentes federales tienen acceso a las bases de datos de la compañía con la finalidad de identificar y dar seguimiento -llamadas desde números que consideren sospechosos.

 

En el caso de Arizona, el documento explica que la DEA consiguió, a través de la búsqueda de líneas que fueron desactivadas, los números de teléfonos que se utilizaron como reemplazo en un intento por no dejar rastro del origen de las llamadas.

 

Posteriormente, los agentes identificaron “múltiples teléfonos mexicanos” que utilizaron los servicios de roaming desde los Estados Unidos, y de los cuales se obtuvieron datos que permitieron la localización y decomiso de las drogas.

 

Una de las ventajas del “Proyecto Hemisférico”, describió el documento y el diario estadunidense, es que permite identificar números y llamadas de cualquier compañía que utilicen las redes de AT&T  y no solo los de los clientes de esa empresa.

 

La información oficial advierte que los aseguramientos se efectuaron desde “principios” del 2012, y se espera que vengan nuevos golpes, toda vez que la investigación está abierta y continúa el seguimiento de llamadas.

 

La frontera de Arizona  es una de las principales rutas de trasiego de drogas de México hacia Estados Unidos, y es operada principalmente por los Cárteles de Sinaloa y la organización de los Arellano Félix.

 

Este diario publicó que durante el sexenio pasado, se ubicaron al menos 57 narco túneles de grandes dimensiones, 37 de ellos precisamente en la zona limítrofe de Sonora y Arizona.

 

Otros golpes

 

La colaboración entre la DEA y la compañía AT&T ha derivado en otras acciones exitosas, además del golpe a los narcotraficantes mexicanos, como por ejemplo la identificación y arresto de Melissa Ann Griggs, una mujer que en varias ocasiones amenazó con colocar bombas en hospitales, escuelas, bancos y oficinas de gobierno de Carolina del Sur.

 

También las policías locales han aprovechado este esquema de colaboración.  Por ejemplo, agentes de Los Ángeles detuvieron a siete integrantes de una banda que con máscaras de hockey robo 30 relojes Rolex de una joyería. Lo anterior se logró gracias al rastreo del celular del líder del grupo delictivo.

 

¿Combate bilateral?

 

*(1998) La Operación Casablanca fue una acción secreta del Departamento del Tesoro y otras instancias del gobierno de EU, que permitió descubrir a directivos de 12 bancos mexicanos ligados al narcotráfico.

 

*(2009) La Operación Rápido y Furioso tenía como finalidad monitorear el tráfico de armas desde EU a México. La estrategia de la ATF falló, y miles de armas llegaron a delincuentes mexicanos sin que fueran ubicadas.

 

*(2011) La Operación Lowrider, según medios estadunidenses, permitió que aeronaves tripuladas de EU sobrevolaran espacio aéreo mexicano para buscar delincuentes, situación prohibida por la legislación en México.