Al menos 43 mil escuelas de todos los niveles tuvieron afectaciones que van desde cierres preventivos hasta daños totales debido al paso de las tormentas Ingrid y Manuel, de acuerdo con la Secretaría de Educación Pública (SEP).
El titular de la dependencia, Emilio Chuayffet, precisó que la cifra de centros educativos que tuvieron daños en su infraestructura no llega a 500 hasta el momento, y que estos se ubican en los estados de Veracruz, Tamaulipas, Puebla, Hidalgo, Zacatecas, Colima, Guerrero, Oaxaca, Sinaloa y Chihuahua.
Sin embargo, de acuerdo con un diagnóstico del Centro Nacional de Prevención de Desastres (Cenapred) la infraestructura escolar y hospitalaria de 12 entidades es la más vulnerable ante un ciclón tropical.
Guerrero, Tabasco, Oaxaca y Veracruz son los estados donde se registran afectaciones constantes en centros escolares, según un reporte del Instituto Nacional de la Infraestructura Educativa (INIFED).
También se reportaron daños en Sinaloa, Sonora, Tamaulipas, Quintana Roo, Puebla, Michoacán, Nuevo León, Durango y Chiapas, donde el instituto debió intervenir para destinar recursos económicos a los planteles dañados.
Tras los daños que causaron las tormentas Ingrid y Manuel en el país, entidades como Puebla destinaron recursos para reparar 10 centros escolares y reponer el material de los alumnos.
HOSPITALES DAÑADOS
Asimismo, el Cenapred destaca que la mayor concentración de centros hospitalarios de cualquier nivel está ubicada en el centro y sur del territorio nacional. Sin embargo, el sistema de salud que se encuentra en el norte de Tamaulipas, el sur de Jalisco, Veracruz, Baja California, Veracruz, Campeche, Quintana Roo y Guerrero, tienen más probabilidad de resultar afectados por los fuertes vientos y las lluvias de un ciclón.
La semana pasada la Secretaría de Salud reportó que hasta el momento no había recibido el reporte de daños severos a los hospitales o centros de salud, salvo algunas grietas y goteras, dijo el subsecretario de Prevención y Promoción de la Salud, Pablo Kuri.
Desde el año 2000, los daños a escuelas y hospitales por lluvias, vientos e inundaciones ascienden a ocho mil 832 millones de pesos, de los cuales el Fondo de Desastres Naturales (Fonden) sólo cubrió una cuarta parte de los daños.
En ese lapso resultaron educativas afectadas 23 mil 935 unidades, que representaron cuatro mil 560 millones de pesos, pero sólo recibieron mil 854 millones de pesos para atender la emergencia. Lo mismo ocurrió con mil 939 centros de salud, que sólo recibieron 914 millones de pesos aunque los daños se calcularon en más de cuatro mil 200 millones de pesos.
A pesar de la importancia social, en la que incluso las escuelas funcionan como albergue en situaciones de emergencia, estos recursos representan una tercera parte del Fonden, ya que la mayoría se destinan a liberar y mejorar el sistema carretero del país.