Al menos cinco de los 27 jóvenes que fueron detenidos el miércoles y que se reconocen como anarquistas, han participado en los últimos meses en manifestaciones violentas y en la toma de instalaciones públicas.

 

Todos son estudiantes de la UNAM, pero cuatro de ellos fueron expulsados por sus acciones consideradas como violentas por la normatividad interna. Lo mismo han estado en Oaxaca que en el Distrito Federal manifestándose o en la toma de las instalaciones del CCH Naucalpan y en las de Rectoría de la UNAM, en donde causaron destrozos y robaron dinero y bienes de la institución, por lo que existe una investigación en su contra desde abril.

 

Se trata de Aztlalli Cabrera Prado, Hugo Guillermo Mejía Ventura, Christian Antonio Carmona Emmert, Irene Pérez Villegas y José Luis Ramírez Alcántara, a quien se le identifica como El Chompiras, ahora nuevamente detenidos el miércoles, durante la marcha del 2 de octubre, y acusados de ataques a la paz pública, por lo que permanecen en la Agencia del Ministerio Público de Iztapalapa.

 

Los detalles

 

José Luis Ramírez Alcántara, Irene Pérez Villegas –novia del primero- y Christian Antonio Carmona tienen apenas 19 años y ya fueron expulsados del CCH Naucalpan por la toma violenta de la dirección del plantel, acción que llevaron a cabo con otros compañeros.

 

En esa ocasión rociaron con gasolina las oficinas de esa dirección y les prendieron fuego. No fueron detenidos, pero las autoridades universitarias concluyeron su trámite de expulsión.

 

Los tres participaron, junto con Aztlalli Cabrera Prado, de 21 años, quien también fue expulsada en el CCH Naucalpan, y otros compañeros más, en la toma de las oficinas de Rectoría de la UNAM durante 12 días, la cual realizaron para tratar de impedir su expulsión.

 

Cuando dejaron libres las instalaciones, las autoridades presentaron una denuncia penal por el robo de cheques y equipo, así como el destrozo de computadoras, vidrios, puertas y escritorios.

 

Pero ya antes, José Luis y Christian Antonio había participado en las manifestaciones violentas del 1 de diciembre, día de la toma de protesta de Enrique Peña Nieto. En esa ocasión tampoco fueron detenidos, pero el saldo de esos hechos en los que se ubicaron por primera vez a unos 200 anarquistas, fue de comercios e inmobiliario de la ciudad severamente dañados, además de policías golpeados y equipo roto.

 

Particularmente El Chómpiras, fue identificado por las autoridades por atacar a policías y hacer vandalismo en comercios y edificios público durante el pasado 1 de diciembre.

 

Más destrozos

 

El pasado 6 de julio, Hugo Guillermo Mejía Ventura y Christian Antonio Carmona Emmert, de 21 y 19 años respectivamente, fueron detenidos junto a dos personas más, por presuntamente participar en la toma de la radiodifusora del Grupo Oro en el Centro Histórico de Oaxaca.

 

Esta captura, de acuerdo con periódicos locales, ocurrieron en el marco de protestas que realizaron profesores de la sección 22 de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de Educación (CNTE) y el llamado Frente Único de Lucha (FUL-APPO) y la toma de al menos cuatro radiodifusoras y la sede de la televisora local, como intento de boicotear los comicios del pasado 7 de julio.

 

Policías revisaron sus mochilas y encontraron capuchas y radios de comunicación.

 

Otros integrantes

 

En las detenciones llevadas a cabo el miércoles pasado se identificaron a miembros de organizaciones que, en otras marchas ya han sufrido la detención de otros de sus integrantes.

 

Tal es el caso del Colectivo Individuos Solidarios, que en el desalojo de maestros del Zócalo, el pasado 13 de septiembre, fue detenido Fernando Galindo Benítez, integrante de esa asociación. La policía también detuvo a otro integrante, pero era un menor de edad. Esta vez hay otro menor de edad detenido.