Este año no será tan bueno como Schneider Electric esperaba. El gasto del gobierno no fluyó como debía y la economía mexicana crecerá mucho menos de lo estimado. Sin embargo, la empresa de origen francés especializada en la administración de energía ve oportunidades de inversión, gracias al crecimiento de las manufacturas en México, a su cercanía con Estados Unidos y a las posibilidades que puedan surgir en el sector si se aprueba la reforma energética.

 

“Estamos a la expectativa de que vamos a tener un año bueno, pero no tan bueno como esperábamos, pero creo que el asentamiento del gobierno está siendo el adecuado, ya que está proponiendo los cambios necesarios en las leyes con las reformas que se han comentado, y seguramente 2014 va a detonar mucha inversión”, dice en entrevista Enrique González Haas, presidente de Schneider Electric para México y Centroamérica.

 

La eventual aprobación de la reforma energética, reconoce, puede resultar importante para crecer como distribuidor de sus productos dentro de Petróleos Mexicanos (Pemex) y la Comisión Federal de Electricidad (CFE).

 

Hoy, la compañía cuenta con 12 plantas de manufactura que se ubican en lugares como Monterrey, Tijuana, Estado de México y Tlaxcala. Durante 2012, logró ventas a nivel mundial de 24,000 millones de euros, mientras que en México sus ingresos crecieron 15%.

 

El pasado 10 de septiembre, Schneider Electric inauguró su segundo Centro de Desarrollo e Innovación en Monterrey, Nuevo León, con una inversión inicial de 65 millones de dólares, a los cuales se sumarán dos millones de dólares más para un parque solar.

 

Pero el potencial de expansión en México podría estar llegando a su tope. “Hay áreas de oportunidad en algunos productos en las que nuestras capacidades están llegando a un límite, y entonces tendrá que pensarse en cómo expandir esa manufactura o consolidar algunas líneas”, explica.

 

Es aquí donde la reforma energética abre una nueva ventana de oportunidad. “La reforma energética, para nosotros, es positiva porque viene a ayudar a dar el siguiente paso y que hagamos un mejor aprovechamiento, tanto de lo que hay en el subsuelo, como también de todo el sistema que va relacionado con todas las cadenas de distribución energética, tanto en cuestiones de electricidad como en cuestión de combustibles”, dice el directivo.

Schneider Electric invierte casi el 5% de sus ventas en investigación y desarrollo, alrededor de 1,500 mdd, que han generado más de 600 patentes anuales a nivel global.

 

Lo que viene no será sencillo, pero Schneider está lista para afrontar los retos. Así lo cree Enrique González Haas: “Hay que trabajar muy duro e ir por las cosas difíciles, y no conformarnos con lo sencillo y lo fácil, hay que hacer la tarea”.