El cantante Christian Chávez primero subió a Twitter una foto con los brazos y las muñecas ensangrentadas y luego la borró y dijo que no entendía a la gente con doble moral. Todo el mundo entendió que era una mala broma, sus fans se preocuparon y muchos otros lo atacaron.

 

Ahora Christian dice que la foto era real: “Para mí es importante aclarar que las imágenes eran reales, estoy pasando por un proceso difícil que sé, no soy el único, sé que muchos jóvenes pasan por este tipo de procesos. Pero también sé que con mi familia y el amor de todos ustedes, con el amor de Dios y sobre todo luchando por lo que quiero y amo, voy a salir adelante”.

 

Nadie puede desearle que le vaya mal, pero es notorio que no está bien y que lleva tiempo batallando por tener estabilidad emocional. Primero estando en RBD se desmayaba con frecuencia, luego anunció a través de un comunicado su homosexualidad; más adelante se casó en Canadá y su marido lo dejó en la quiebra; se divorciaron. Volvió a creer en el amor y se enamoró de un tipo que le pegaba, también lo encontraron en NY fumando marihuana.

 

El caso es que, aunque tiene mucho talento, Christian Chávez no ha podido avanzar como cantante por todos estos problemas y ha provocado que muchos dejen de creer en él y lo consideren tan sólo un chico inestable.

 

PALOMA Y TACHE

 

TACHE para Galilea Montijo, quien dice que quiere unirse a los famosos para que los paparazzis no fotografíen a sus hijos y ella sube a su Twitter una imagen de su marido y su niño. Aunque sea libre de hacerlo, si la idea es cuidar la identidad del niño, esta sería la peor forma de hacerlo porque la idea de la ley que proponen es mantenerlos lejos de las cámaras y en absoluta privacidad.

 

PALOMA para Demi Lovato, quien dice que es falso que se haya peleado en The X Factor con Paulina Rubio, que por el contrario es como su hermana mayor y muy dulce y amable con ella. Por cierto, Demi aprovechó la estancia en nuestro país para presentar el CD titulado Demi.