La economía mundial crecerá 3.3% en este año según lo que han pronosticado los economistas del Fondo Monetario Internacional, una cifra nada mala tomando en cuenta que en 2011 el crecimiento global habría sido de alrededor de 3.8%, según el propio FMI.

 

Sin embargo en coyunturas de graves desequilibrios económicos como las que se están viviendo en diversas regiones del mundo, estas grandes cifras suelen ser bastante engañosas ya que ocultan realidades particulares dispares y cambios económicos subrepticios incluso de gran calado.

 

Veamos tres asuntos entresacados de las cifras del FMI y que The Economist ilustró ayer con un par de gráficas que no tienen desperdicio:

 

PRIMERO.- En 2012 las llamadas economías emergentes sustentarán el 81.8% del crecimiento mundial pronosticado (dicho sea de paso, México contribuye con 2.2% del crecimiento global). Puesto de otro modo, sin economías como China, India y América Latina, la economía global apenas crecería 0.6% por lo que la recesión en los países europeos sería mucho más profunda.

 

SEGUNDO.- Como resultado de la crisis económica, el aporte de Estados Unidos al crecimiento económico global se ha reducido de forma notable al pasar de 21% en los años ochenta, a 10% pronosticado para el periodo 2010-13. Por el contrario China se ha convertido, literalmente, en el ‘motor’ de la economía global al aportar un tercio del crecimiento económico global esperado (31%) para ese periodo. Para este año se pronostica que China aportará el 37.4% del crecimiento económico mundial.

 

TERCERO.-Las economías avanzadas serán ‘subsidiadas’ en 2012 por el crecimiento de las economías emergentes. Su contribución de 18.2% al crecimiento económico mundial proviene fundamentalmente de la dinámica económica esperada en Estados Unidos, Japón y Canadá a tasas de crecimiento de alrededor de 1.8%, mientras que para las economías de la zona euro se esperan caídas en el crecimiento cercanos a 1% en promedio por lo que, en lugar de sumar, restarán al crecimiento económico global en poco más de 2 por ciento en el año.

 

Esta descripción gráfica de lo que está ocurriendo con los balances de la economía global no pasa desapercibida en los ámbitos políticos y diplomáticos por lo que aplica aquella frase popular algo grotesca –pero muy sincera- de que “con dinero baila el perro”. Pues bien, eso lo sabe bien el gobierno chino cuyo creciente aporte a la economía global es su mayor palanca de apoyo para ganar influencia en las decisiones de la política y la economía internacional que se avecinan. El propio gobierno brasileño –cuya contribución de 2.7% a la economía mundial es muy similar a la mexicana- ha sido inteligente en el uso de este recurso magnificado por la crisis.

 

Todo esto de las cifras económicas viene a cuento porque bajo ese contexto económico se realizará en el país la reunión de líderes del mundo –aglutinados en el Grupo de los Veinte- bajo la presidencia de México.

 

Como se ve, los balances económicos están cambiando la influencia de las naciones emergentes y México está llamado a ganancias mayores que la sola atracción de reflectores para el turismo y la inversión del país, lo que ciertamente es deseable; pero a todas luces insuficiente.

 

samuel@arenapublica.com | @arena_publica | www.arenapublica.com