LA HABANA. Las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia-Ejército del Pueblo (FARC-EP) y el gobierno del presidente Juan Manuel Santos, anunciaron un acuerdo sobre la participación del grupo insurgente en la vida política del país, Desde La Habana, ambas partes hicieron el anuncio que significa un nuevo paso en este camino en busca del fin de la guerra, que ya lleva más de 50 años.

 

A través de un comunicado conjunto emitido desde el Palacio de Convenciones de La Habana, ambas delegaciones aseguraron que con el acuerdo firmado está garantizado que se den las características necesarias para que surjan nuevas opciones políticas, lo que implica “Hay consensos en temas de derechos y garantías de posición política para los nuevos movimientos que surjan (…) que tengan acceso a los medios de comunicación”, señala el documento.

 

Asimismo, el texto agregó que “en el acuerdo se estima garantizar los mecanismos de participación ciudadana en los diferentes niveles sociales con el objetivo de promover participación política regional y local de todos los sectores en igualdad de condiciones”.

 

En la firma del acuerdo sobre participación política también quedó claro que las FARC tendrán su propia organización política lo que les permitirá tener miembros suyos en la Cámara de Representantes en varias regiones del país.

 

Las condiciones particulares para el nuevo movimiento que surja del tránsito de las FARC a la actividad política legal, serán discutidas en el marco del punto 3 de la agenda”, dijeron las partes.

 

El acuerdo ordena, de la misma manera, que tras la firma del fin del conflicto, habrá una reforma del actual régimen electoral, con el apoyo de todos los partidos políticos.

 

Sistema de seguridad

 

 

Además, se acordó un sistema integral de seguridad para el ejercicio de la política “para el nuevo movimiento que surja de las FARC a la actividad política legal”. Este era uno de los puntos más álgidos ya que la experiencia anterior de participación política de la guerrilla, la Unión Patriótica en la década del 80, terminó con el asesinato masivo de sus dirigentes.

 

Y por último, se prevé el establecimiento de Consejos para la Reconciliación y la Convivencia en el nivel nacional.

 

Las delegaciones de la agrupación y del Ejecutivo colombiano iniciaron el proceso de conversaciones el pasado 18 de octubre de 2012, en la ciudad de Hurdal, en las afueras de Oslo (capital de Noruega) y luego fueron trasladadas a La Habana donde se desarrollan desde noviembre con Venezuela y Chile como países acompañantes.

 

En ese encuentro, los representantes de ambas partes establecieron una agenda de cinco puntos para debatir: el desarrollo agrario –ya acordado-, participación política que es, fin del conflicto y desmovilización, solución al problema de las drogas ilícitas y reparación a las víctimas. y la implementación, verificación y refrendación, respectivamente.

 

ONU aplaudió pacto

 

La ONU ratificó a través de un comunicado de prensa su respaldo a los Diálogos de Paz “Es importante dar continuidad a los Diálogos por la Paz, a fin de acabar el sufrimiento cotidiano y otras graves consecuencias humanitarias que vive Colombia”, reveló el oficio. La ONU junto a diversas casas de estudio del país latino, han organizado actividades para consolidar la paz en Colombia. Foros ciudadanos que brinden a la sociedad aportes para el desarrollo rural, la participación política y la solución al problema de las drogas ilícitas, han sido temas de interés presentados en mesas de trabajo en La Habana.