ROMA. El fiscal italiano Nicola Gratteri aseguró en una entrevista con el diario Il Foglio Quotidiano que el Papa Francisco podría ser blanco de la mafia si continúa con su política de limpieza financiera en el Vaticano.
Gratteri. que tiene una carrera de 26 años en la DDA (Dirección Distrital Antimafia) dedicada a combatir el crimen organizado en el sur de Italia, operación de limpieza que el Papa comenzó nada más ser elegido Pontífice -hace ocho meses- está desatando las alarmas de los capos de la mafia, y su reputación indica que hay que tomar en serio su advertencia, según analistas de la prensa italiana.
En la entrevista, aseguró que el mensaje del papa Francisco es indigerible en los ambientes de la mafia calabresa y pone nerviosos a los “capos”: “No sé si la criminalidad organizada está en condiciones de hacer algo, pero ciertamente lo está pensando. Puede ser peligroso”.
El nuevo curso dado por Francisco a la Santa Sede no es del gusto de la criminalidad organizada que, si pudiera sacarlo del medio, “no dudaría” en hacerlo advierte. Sus declaraciones contra la corrupción y, más recientemente, contra la evasión, con palabras claras que no admiten dobles interpretaciones, no pasan inadvertidas para estos sectores, señala Gratteri .
Las mafias, advierte, y en particular la ‘Ndrangheta, están preocupadas porque el pontífice “está desmontando centros de poder económico en el Vaticano” y “el mafioso que invierte, que recicla dinero, que tiene por lo tanto verdadero poder, es aquel que por años se ha nutrido de la connivencia con la Iglesia; son estos sujetos los que se están poniendo nerviosos”.
Si bien el funcionario reconoció que no sabe si el crimen organizado está en condiciones de efectuar un atentado, especuló que “ciertamente lo están reflexionando”.
El experto en crimen organizado aseguró que hoy en día mandan los “mafiosos inversores” que se dedican al lavado de dinero y han hecho grandes fortunas con la connivencia de la Iglesia.
El fiscal también denunció a algunos sacerdotes y obispos de Calabria que dan legitimidad popular a los capos de la mafia negándose a excomulgarlos y hasta reuniéndose a tomar café con ellos. ¿Por qué lo hacen?, se pregunta. “Alguno podría pensar que deben redimir todas las almas sin discriminar, pero así es demasiado fácil: sigue delinquiendo y el cura te da incluso una mano”.
“El 88% de los mafiosos se declara religioso –advierte-: antes de matar, un ‘ndranghetista reza, se dirige a la Madonna ( en italiano, Mi señora) para tener protección y cree estar en lo justo”.