En toda legislatura hay diputados que destacan, para bien o para mal. Y aunque en esta LXII Legislatura algunos de nuestros compañeros que cubren la “fuente” consideran que no hay a cuál irle -“los actuales son peores que los anteriores”, nos dicen- vamos a aventurar algunos nombres de quienes, a nuestro parecer, se han hecho notar.
Comencemos con los panistas, en cuyas manos está en este momento la presidencia de la Mesa Directiva en la persona del queretano Ricardo Anaya Cortés. Desde nuestro punto de vista, él ha sido la revelación del periodo de sesiones: inteligente, culto, amable y con sentido político y de estrategia.
Valga destacarlo porque, a diferencia de Raúl Cervantes Andrade (PRI), presidente del Senado, Anaya -que vaya que también es inteligente- sí que le ha sacado provecho a su posición en lo que a términos mediáticos se refiere. En cambio, el priista, para nuestro gusto, ha desaprovechado su posición para figurar en los medios de comunicación. Dice a los reporteros que él es jurista y da media vuelta. Pues así ya ni se le acercan a preguntarle de nada.
Otro que figura por Acción Nacional, aunque no precisamente con las mejores credenciales, es el sinaloense Jorge Villalobos Seañez. A este diputado, muy cercano a Gustavo Madero, se le tiene como el hombre que hace el trabajo sucio y el que rompe negociaciones. Cuando se le ve moverse, ¡aguas!, todos se ponen en alerta.
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LOS DE LA IZQUIERDA.- Dirán que aquí lo difícil no es encontrar quiénes armen escándalos, sino quienes valgan la pena. Y bueno, algo de razón tendrían. Aunque sí anotaremos nombres de algunos diputados de izquierda cuyo trabajo nos ha parecido bueno.
Van los de Miguel Alonso Raya y Fernando Zárate por parte del PRD. Aplicados en su chamba y muy derechos ambos. Al igual que los de Ana Lilia Aguilar, del Partido del Trabajo, y Luisa María Alcalde, de Movimiento Ciudadano (aunque a veces a esta última se le pasa la mano en estridencia)
El caso de Silvano Aureoles, coordinador de la bancada perredista, ha dejado mucho qué desear pues ha habido momentos en que deja la impresión de estar más cerca de las posiciones del coordinador priista, Manlio Fabio Beltrones, que de las de su partido (aunque en ocasiones el sonorense le dé sus zapes).
En la lista negra pondríamos a cuatro perredistas: a la “pica ojos” Karen Quiroga Anguiano, a Aleida Alavez, a Antonio García Conejo (el que se desnudó en la tribuna) y a Luis Ángel Espinoza Cházaro, personaje al que intentan posicionar los Chuchos a como dé lugar (les manejó los dineros a Jesús Ortega y a Jesús Zambrano), pero que es rechazado por sus propios compañeros de bancada.
Claro, no podía faltar el petista Manuel Huerta Ladrón de Guevara, cuyas exhibiciones nos hacen añorar a Gerardo Fernández Noroña.
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LA BURBUJA TRICOLOR.- ¿Qué de qué lado los vamos a poner? ¡Mejor ni pregunten! Van nomás los nombres de los priistas que se han movido en serio en estos meses de sesiones.
Comencemos por los dos brazos operadores de Beltrones: el tamaulipeco Marco Antonio Bernal y el ex alcalde de Acapulco, Manuel Añorve. Muy buenos ambos para operar aunque no pocos los consideren algo “siniestros”.
Pero no son los únicos. Habría que agregar al duranguense Jorge Herrera Delgado y al regio Héctor Gutiérrez de la Garza, ambos finos operadores.
Y del propio Beltrones ni se diga. El sonorense tiene bien ganada la fama de ser uno de los políticos más astutos de los últimos tiempos.
Sabe cuándo y cómo ejercer el papel de oposición, convirtiéndose incluso en factótum del gobierno en cuestión (ocurrió con el PAN); y cómo funcionar bajo un gobierno de su propio partido, aunque en el círculo del poder en torno a Los Pinos lo miren con recelo. Su eficiencia es inigualable.
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GEMAS: Cuenta Fidel Castro lo que su hermano Raúl le dijo a Barack Obama cuando el presidente de los Estados Unidos le estrechó la mano durante los funerales de Nelson Mandela: “Señor presidente, yo soy Castro”.
Con ésta nos despedimos del 2013. Gracias a todos aquellos que nos obsequiaron tantas gemas durante este año. Va un entrañable abrazo y esperemos reencontrarnos a partir del próximo 6 de enero con una enorme sonrisa.