Los conflictos en Siria, Sudán del Sur y la República Centroafricana “van de mal en peor” y ponen en riesgo años de desarrollo y a una generación de jóvenes atrapados en estas crisis, consideró hoy el secretario general de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), Ban Ki-moon.
En una conferencia de prensa en la sede de la ONU, Ban indicó que estas tragedias, que imponen un elevado precio a la población civil, son evitables, por lo que requirió de la comunidad internacional más atención a estas situaciones, así como más recursos y apoyo político.
Expresó también su alarma por la expansión de los odios sectarios en las crisis de Sudán del Sur, Siria y la República Centroafricana, así como por el potencial de que estos conflictos se desborden de sus fronteras nacionales y afecten regiones enteras.
En el caso de la crisis en Sudán del Sur, agudizada desde diciembre pasado, se enfrentan los grupos étnicos Dinka contra el Nuer, en tanto que en la República Centroafricana combaten desde hace casi un año cristianos contra musulmanes.
En Siria, donde el conflicto está por cumplir tres años, el grupo musulmán alauita, al que pertenece el presidente Bashar al-Assad, se enfrenta contra los suníes, que son la mayoría de la población en el país.
En ese sentido, Ban apuntó que la asistencia humanitaria, tan vital como es, es sólo parte de la respuesta que debe ofrecer la comunidad internacional a estas crisis en el mundo, y pidió que se redoble el empuje para impulsar la paz y la rendición de cuentas.
“Juntos, debemos mandar un poderoso mensaje de que habrá rendición de cuentas por las muertes, las violaciones, los ataques con armas químicas y otros crímenes atroces que han sido cometidos”, señaló.
Pese a la precaria situación en Siria, Sudán del Sur y la República Centroafricana, el titular de la ONU también destacó que ha habido avances recientes para la consecución de la paz en estas naciones.
Recordó que la ONU ya envío las invitaciones para la Conferencia sobre Siria, a celebrarse en Suiza a partir del 22 de enero, que tiene la intención de negociar un gobierno de transición con plenos poderes ejecutivos.
Asimismo, dio la bienvenida a las conversaciones que se celebran en Addis Ababa, capital de Etiopía, en torno a la crisis en Sudán del Sur, y urgió a las partes que acuerden un cese a las hostilidades.
El máximo funcionario de la ONU subrayó además que tras el anuncio de este viernes sobre la renuncia del presidente y el primer ministro de la República Centroafricana, esperaba que el país se enfocara en detener las hostilidades y en restaurar la ley y el orden.
“Pese a las crisis y preocupaciones, 2014 también ofrece grandes oportunidades para construir un mundo más seguro, justo y próspero. Estoy resuelto en hacer que este año sea de progreso para la gente y para el planeta”, afirmó.