Un día después del arribo de las fuerzas armadas federales a Apatzingán, Michoacán, y el anuncio del gobernador Fausto Vallejo de despachar desde Tierra Caliente para contener la entrada de las guardias de autodefensas, este municipio despertó con un incendio a una farmacia que se ubica a menos de tres cuadras de la cabecera municipal.

 

Lo que provocó que cientos de comerciantes que pensaban reabrir sus negocios, confiados de que con tantos elementos militares y de la Policía Federal regresaría la paz, decidieron no abrir.

 

Fueron pocos los aventurados que sí subieron sus cortinas a sus locales comerciales.

 

Inés, empleada de una zapatería, se mostró incrédula ante la llegada de cientos de policías federales y soldados del Ejército mexicano.

 

“Esto no se va a resolver rápido, ni aunque manden más elementos para cuidarnos. Mejor ni me expongo y no abro mi negocio”.

 

Y las fuerzas del orden deambulan por la región sin rumbo fijo.

 

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De ‘cuernos de chivo’ hasta ‘erres’

 

A unos 15 minutos de Apatzingán, en El Plátano, se encuentra un retén de las guardias comunitarias que a discreción detienen vehículos para revisar lo que traen en su interior.

 

Un joven que recién cumplió 18 años cuenta , con mucho orgullo, que ya sabe manejar armas: “Desde ‘cuernos de chivo’ hasta ‘erres’ (AR15) o pistolas; acá te enseñan pero pues todavía no he disparado y he estado en ningún enfrentamiento”.

 

– ¿Y no te da miedo?

 

– “No, miedo no. Jamás. Matar a estos lacras no”.

 

Antes de comenzar esta entrevista solicita que no le graben el rostro aún y cuando lo tiene completamente cubierto, salvo los ojos, con una playera negra decolorada.

 

El muchacho, quien apenas terminó la primaria, ya no quiso estudiar más. Cuenta que quiso encontrar un trabajo digno pero no encontró oportunidades. Ahora está contento de apoyar a las autodefensas aunque sea para llevar comida o vigilar la carretera toda la noche.

 

“Después de esto voy a buscar trabajo. Un buen trabajo para ayudarle a mi familia”.

 

De forma abrupta concluye la charla, para revisar un vehículo que se acerca al retén.

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Calles vacías

 

La señora María Quezada reconoce que Buenavista está mejor pero las calles están vacías.

 

“La gente ya no sale de sus casas porque tiene miedo pero pues así está mejor y ya puedo abrir mi tiendita”.

 

Ahora lo que gano, agregó, lo tengo para mi y no tengo que estarlo repartiendo con la gente que me extorsionaba y me pedía la mitad de mis ganancias.

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“Tiros al aire” del adiós

 

Muy cerca de allí, a unos 500 metros, cientos de personas acudieron al panteón de Buenavista para despedir a Alfredo López Flores, un muchacho de 25 años, quien fue alcanzado por una bala disparada presuntamente por soldados del Ejército en su intento de ingreso a Nueva Italia.

 

La gente está enojada y unos diez miembros de las autodefensas disparan miles de balas de sus ‘cuernos de chivo’ al aire para recordar al fallecido. Casi a su lado, los familiares se tiran al suelo y lloran amargamente su pérdida.

 

A la par, la tambora no dejó de tocar “Caminos de Michoacán” para despedir al joven.

 

 

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Foto: AFP

Fallida incursión, en medio del dolor

 

El Sol está a todo lo que da, pasado el mediodía al concluir el entierro.

 

Una llamada por radio de onda corta avisa a los comunitarios que un convoy militar intenta ingresar por el acceso sur de Buenavista, a unos 10 minutos del panteón.

 

Los guardias de autodefensa y unas 100 personas se trepan en camionetas para trasladarse al punto.

 

Minutos después, una mujer de las autodefensas, acompañada por unos 15 pobladores, se acercan para platicar con el responsable de los militares, quien se identifica como el coronel Beltrán Valdez.

 

Los buenavisteños están molestos, enojados. Les gritan de todo a los soldados. Los insultan.

 

El coronel les informa que su intención no es quedarse en la zona, que se dirigían hacia Tepalcaltepec y que no podían irse por otro camino. Uno de los habitantes, bastante alterados, los amenaza de forma airada.

 

Al final, los ánimos se tranquilizan, los soldados suben a sus camiones y los habitantes de Buenavista les abren el paso por la carretera.

 

“Váyanse a proteger a Los Templarios que buena falta les hace”, se escucha la arenga de uno de los pobladores.

 

 

Encerrona en Tepalcatepec

 

A las 4 de la tarde representantes de todas las autodefensas que operan en Michoacán se reúnen en Tepalcaltepec para decidir el futuro de los grupos.

 

La reunión es privada y le piden a los medios de comunicación que han llegado al lugar que no se acerquen y no hagan fotografías o videos.