El terrorismo, simplificándolo, es la dominación por medio del terror. No es nuevo, ni empezó en el 2001. No es el enemigo de la democracia y de los Estados Unidos. El terrorismo es una táctica bélica que utiliza la violencia repetida contra un objetivo secundario para atacar a otro objetivo principal. Es decir, en un acto terrorista que tiene en la mira al gobierno de un país, el golpe no se dirige al presidente o al congreso, sino a un grupo de gente que lo forcé a actuar como se desea. El hermano grande, que para castigar a la mamá, le pega al hermano chiquito. Las víctimas no son más que un mensaje.