La consultora de seguridad estadunidense Stratfor
Ayer el procurador General de la República, Jesús Murillo Karam, informó de la captura del líder criminal en el hotel Miramar de Mazatlán el sábado a las 6:40 de la mañana sin que se registrara un solo tiro; después del anuncio fue trasladado al penal de máxima seguridad del Altiplano.
La disputa interna por la red que operaba Guzmán y la pelea de rivales por el control de plazas como Baja California, Sonora, Durango, Chihuahua y Sinaloa ponen en riesgo latente en la región Noreste
Agregó que “El ritmo y éxito de las operaciones dirigidas contra los principales líderes del cártel de Sinaloa obstaculizarán seriamente la capacidad de la organización criminal para defender sus operaciones en el noroeste de México.”
El Chapo fue parte responsable de la expansión del cártel de Sinaloa a territorios trasnacionales rivales. Él también ayudó a supervisar la expansión de sus operaciones, más notablemente a rutas del narcotráfico hacia Europa y Asia.
Sin embargo, desde diciembre, el cártel de Sinaloa ha sufrido una serie de detenciones importantes afectando principalmente al ala cártel que dirige Ismael “El Mayo ” Zambada García.
El cártel de Sinaloa es dirigido por un grupo de jefes del crimen, cada uno con su propia red, que opera bajo una bandera común, sostiene Stratfor.
“Además de Guzmán Loera, otros líderes de primer nivel notables incluyen a “El Mayo” Zambada y Juan José “El Azul” Esparragoza Moreno, quienes guían la estrategia en general y de la actividad a lo largo de México, así como sus operaciones transnacionales”.
Sin embargo, señaló la consultora, con “El Chapo” bajo custodia, los jefes restantes junto con varios líderes menos prominentes buscarán mantener el control de la red de Guzmán dentro del cártel. “Esto podría desatar una ola de violencia en todo el noroeste de México, si los cambios internos evolucionan en conflicto”.
Pero Stratfor advierte que una fuente más probable de violencia, que podría ocurrir junto a la disputa interna del cártel, sería que sus rivales busquen el control de las operaciones de tráfico en territorios donde actualmente opera, incluyendo los estados de Baja California , Sonora , Durango , Chihuahua y Sinaloa.
Por ello, concluye, se podría esperar ver un aumento de la violencia entre los cárteles en alguna escala, así como una respuesta militar para contener o incluso anticiparse a la posible violencia, en cualquier área de los estados antes mencionados.