Desesperación, palabra contundente que describe la situación por la que atraviesa América, que hilvana tres derrotas consecutivas, la última en una actuación dominante (por paradójico que se escuche) ante unos Pumas que terminaron goleando por 3-1 a las Águilas. Por eso la presencia en Coapa de Yon de Luisa, director operativo de futbol de Grupo Televisa y José Romano, presidente operativo de los amarillos, junto a Mauricio Culebro, director de operaciones, la planilla mayor reunida ayer junto al técnico Antonio Mohamed, quien aseguró que los directivos no fueron al club para darle “un jalón de orejas… para nada, vamos a ir a comer”, fueron las palabras del Turco, quien sí aceptó que sus emplumados están “desesperados por ganar”.

 

No es para menos; el sábado, las Águilas visitan al Monterrey en el Tec, y están más obligados que nunca a no caer, a no hilvanar una cuarta derrota; y es que según los números, América sólo ha tenido un año espantoso en los 34 torneos cortos que se han disputado hasta ahora, fue en el Clausura 2008, cuando bajo la dirección de Daniel Alberto Brailovsky, primero, y, luego, Rubén Omar Romano sumaron 12 derrotas en total en un certamen. Cinco al hilo que se repartieron entre Brailovsky y Romano, antes de que el Ruso fuera echado, y seis más consecutivas bajo la dirección técnica de Rubén Omar, con la consecuencia obvia de los los amarillos terminaron en el último lugar de la tabla general por primera y única vez en su historia, porque fuera de aquella ocasión, América no cuenta en el resto de su historial con cuatro derrotas consecutivas desde 1996.

 

Hoy Mohamed ataja como puede críticas y abucheos. “Yo recibo todos los palos porque soy el único nuevo acá, y bueno, así se dio la mano y la acepto como viene, pero no estoy presionado, al contrario”, explica el Turco al tiempo que con más resignación que pena, habla sobre la figura de presidente deportivo que con tanto éxito desempeñó Ricardo Peláez en su etapa con el Piojo en América; Mohamed está solo, aunque dice no sentirse descobijado, aunque acepta la falta que hace Ricardo a las Águilas: “Me siento bien, protegido por ellos, hoy no está la figura de Ricardo, pero hay que adaptarse a lo que es este semestre, sabíamos que iba a ser así”.

 

De las explicaciones que dio a los directivos de lo que sucede con su equipo fue claro, “se habló de la preocupación por no ganar, y también de entender el momento del equipo, de la transición, de no tener el equipo completo para trabajar, de un montón de situaciones, de la poca preparación que hemos tenido, aunque, claro, que no teníamos contemplado era perder estos partidos”.

 

Y es que bajo la percepción del Turco, América no atraviesa una crisis futbolística, “el análisis que hacemos deportivo es que nosotros estamos siendo nuestro principal enemigo porque cometemos errores y nos cuestan goles, estamos fallando en las dos áreas, entonces en el momento que corrijamos eso vamos a volver a ganar y a ser un equipo que esté arriba en la Tabla”.

 

Por eso, y no obstante, ver sentir que hay tristeza entre sus jugadores, también confía en que el sábado ante Monterrey podrán aprovechar el mal paso de Rayados para revertir la situación que los atormenta y regresar a la senda del triunfo: “Creo que el equipo está por buen camino y es buen momento el sábado de poder dar un golpe de autoridad, creo que tiene que ser nuestro momento, hemos dejado pasar tres partidos de manera increíble, pero afortunadamente se nos viene un rival que también está en crisis y eso hay que aprovecharlo”, concluyó.