Los presidentes de México, Enrique Peña Nieto, y Panamá, Ricardo Martinelli, firmaron ayer un Tratado de Libre Comercio (TLC) que permitirá al país centroamericano iniciar su proceso de adhesión a la Alianza del Pacífico.
El acuerdo comercial busca una mayor integración regional, además de aumentar el comercio entre México y Panamá, incrementar el flujo turístico y el tránsito de personas y de mercancías gracias al acceso al Canal de Panamá.
En una breve ceremonia en la capital panameña, el secretario de Economía de México, Ildefonso Guajardo, y el ministro de Comercio e Industrias de Panamá, Ricardo Quijano, concretaron la firma, una semana después de que los mandatarios de ambos países anunciaron en la Ciudad de México la conclusión de las negociaciones que duraron apenas siete meses.
“Cuando hay voluntad, disposición y ganas de que las cosas se hagan y se realicen, es posible llevarlas a cabo. Y esto es lo que se acredita realmente en la firma de este Acuerdo de Libre Comercio entre Panamá y México”, afirmó Peña Nieto.
“Este es un proceso que tomó 15 años, pero producto de la iniciativa del presidente Peña Nieto y del gobierno nacional, cuando reiniciamos este proceso, lo hicimos en un tiempo récord de siete meses”, expresó el presidente panameño.
Peña Nieto indicó que el convenio fortalecerá el intercambio comercial bilateral, que ha alcanzado mil 64 millones de dólares en 2013 y también abre espacios de más oportunidad para la participación eventual de Panamá en la Alianza del Pacífico, bloque comercial conformado por México, Colombia, Perú y Chile.
Para entrar en la Alianza del Pacífico, uno de los requisitos es contar con este tipo de acuerdos con sus miembros fundadores; México es el único país con el que Panamá aún no ha firmado uno.
El TLC desgravará, al igual que el acuerdo comercial de la Alianza del Pacífico, el 92% de los productos de ambos países, mientras que los demás productos serán desgravados de manera gradual durante los próximos años.
“Estoy seguro de que este win-win de ambos países será aprovechado por todos los empresarios de ambos países. Los tratados de libre comercio, la apertura comercial, es lo que hace a un país competitivo.
“Y es por eso que Panamá tiene una de las economías más competitivas de Latinoamérica, y seguiremos trabajando para hacerla aún más competitiva, mejorando nuestra educación, nuestra infraestructura”, dijo el presidente Martinelli.
Los mandatarios también firmaron el Acuerdo Interinstitucional de Cooperación en materia de medicamentos para mejorar la certificación de esos productos. Con este convenio se amplía el mercado de medicamentos tanto en México como en Panamá con el reconocimiento de las certificaciones sanitarias acordadas.
Además, se concretó un Memorándum de Entendimiento en Materia Turística con el objetivo de promover que más mexicanos visiten a Panamá y más panameños viajen a México.
Las organizaciones representantes del sector exportador y empresarial, el Consejo Empresarial Mexicano de Comercio Exterior (Comce) y la Confederación de Cámaras Industriales de México (Concamin) afirmaron que el TLC proveerá estabilidad y seguridad jurídica, simplificación de las operaciones aduaneras, eliminación de obstáculos técnicos injustificados al comercio, protección de la salud humana, animal y vegetal y disciplinas en materia de comercio transfronterizo de servicios e inversión.
“Sin duda, estas cifras será ampliamente rebasadas una vez que los sectores productivos de ambos países se puedan beneficiar de la apertura comercial, facilidad en el manejo de los intercambios de personas, bienes y capitales, y la certidumbre que el nuevo tratado otorgará una vez en vigor”, afirmó Francisco Funtanet, presidente de la Concamin.
Por su parte, el director general del Comce, Lorenzo Ysasi, dijo a 24 HORAS que este tratado de libre comercio que permitirá la adhesión eventual de Panamá a la Alianza del Pacífico, significa una mayor integración regional que permitirá un libre flujo de personas y de mercancías.
“Creo que significa para la región una oportunidad más de tener a un país más integrado dentro de la zona, una dinámica de mejor movimiento económico y mejores condiciones para el flujo de ciudadanos entre los diferentes países”, explicó.
“Es una iniciativa que genera muchas oportunidades para empresarios mexicanos en esa región”, agregó, especialmente porque Panamá está en pleno boom económico, por lo que el gobierno de Ricardo Martinelli desarrolló un importante plan de desarrollo de infraestructura que necesita mano de obra especializada.