México condenó la ejecución de Ramiro Hernández Llana en Texas luego de que las cortes estatales desecharan el argumento acerca de su discapacidad mental comprobada y de que la Suprema Corte de Estados Unidos se negara a revisar el caso.
La Secretaría de Relaciones Exterioes (SRE) aseguró que se cometió una violación al fallo de la Corte Internacional de Justicia dictado en el caso Avena hace más de diez años.
Indicó que Estados Unidos se encontraba obligado a revisar y reconsiderar el veredicto de culpabilidad y la sentencia capital impuesta a Hernández Llanas.
El gobierno de México, a través de la Secretaría de Relaciones Exteriores, desplegó en tiempo y forma, una serie de acciones legales, políticas y diplomáticas, tanto en Estados Unidos como a nivel internacional, hasta agotar todas las instancias a su alcance con el fin de obtener la suspensión de la ejecución del connacional para dar oportunidad a la revisión de su caso.
Entre las acciones legales se encuentra la solicitud a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) de emitir medidas cautelares ordenando a EU la suspensión de la ejecución, mismas que por la gravedad, urgencia y carácter irreparable del caso, fueron otorgadas por la CIDH el 31 de marzo pasado.
México insta de nuevo a EU a adoptar acciones efectivas que impidan que el estado de Texas, o cualquier otro, lleve a cabo la ejecución de cualquier nacional mexicano en desacato del fallo Avena y en incumplimiento de sus obligaciones internacionales.