Arturo Matiello Canales, presidente de la Federación de Universidades e Instituciones Particulares de Educación Superior (FUIPES), aseguró que a mitad de los universitarios de Tamaulipas no acudió a clases en las últimas semanas, debido a los hechos de violencia que se han registrado en la entidad.

 

En entrevista con 24 HORAS, el representante de la red de escuelas aseguró que en las reuniones que sostuvieron con rectores de los centros universitarios de Ciudad Madero y Tampico, hablaron de la “caída impresionante de la matrícula” por las balaceras que se registran en las calles a plena luz del día, así como los secuestros y extorsiones.

 

“Los rectores estiman una caída en la matrícula de 30% de alumnos que ya no regresan a las aula por los hechos de violencia. Y hay un 50% que se están absteniendo de ir, no significa que ya no estudien sino que de momento no están yendo por la situación de violencia. Tienen miedo”, explicó Marttello.

 

Apenas la semana pasada, la Universidad Autónoma de Tamaulipas, el Instituto Tecnológico de Ciudad Madero y la Universidad Autónoma del Noroeste suspendieron actividades el lunes 7 y martes 8 de abril, después de que el fin de semana previo unas 18 personas perdieron la vida durante enfrentamientos entre civiles armados.

 

“Hay mucho desconcierto entre los alumnos, maestros y personal administrativo. No saben bien a bien qué hacer porque se ha desatado una ola de violencia como no la habían vivido en muchos años”, dijo Matiellos Canales.

 

Datos de la Primera Encuesta Nacional Universitaria sobre Violencia y Consumo de Drogas, -elaborada por la FUIPES y en la que participaron mil 900 estudiantes, catedráticos y rectores de 95 instituciones de educación superior en todos el país-, reveló que 76% había sido víctima de algún delito.

 

Además, 33% dijo sentirse inseguro al asistir a la universidad, pues entre los 15 incidentes delictivos más comunes en las calles aledañas están los robos y asaltos, secuestros, extorsiones, cobros de piso, venta de drogas y disparos frecuentes.

 

Ante esta situación, la vida universitaria dentro del campus se desarrolla hasta las seis de la tarde, después de esa hora toda la comunidad se va a su casa y ya no sale, comentó Mattiello.

 

El abandono temporal de las universidades se repite en Cerro Azul, Poza Rica y todas las ciudades del norte de Veracruz, ubicadas en la cuenca del Río Pánuco y colindantes con el sur de Tamaulipas, una zona controlada por el Cártel del Golfo.

 

En las últimas semanas seis células que componen el cártel exacerbaron la disputa por el puerto de Tampico, Madero, Altamira y González. El viernes 11 de abril supuestos integrantes de Los Zetas difundieron una imagen en la que advirtieron a los pobladores de la entidad “irse o encerrarse”, pues van a pelear la plaza local al Cártel del Golfo.