El sacerdote Alejandro Solalinde Guerra exigió el gobierno federal proteger a los migrantes nacionales y centroamericanos que transitan por el país, esto luego de la agresión reportada a los tripulantes de La Bestia, en el Istmo de Tehuantepec.
Esta tarde cuatro migrantes murieron y tres mexicanos resultaron heridos durante un asalto a un tren de Ferrocarriles del Istmo de Tehuantepec (FIT), ocurrido a seis kilómetros de Reforma de Pineda, zona Oriente del Istmo.
Alejandro Solalinde Guerra, responsable del albergue “Hermanos en el camino”, en Ciudad Ixtepec, visitó a los tres heridos que se encuentran en el Hospital General “Macedonio Benítez Fuentes” de Juchitán, Oaxaca.
El religioso acusó que las constantes agresiones a los migrantes es resultado de la pugna entre “cárteles que se disputan la población en movimiento”.
“De lo que hemos recabado, podemos decir que fue un castigo, una represalia de quienes supuestamente estarían cobrando cuotas. Estamos hablando que hay una pugna entre dos cárteles, donde los migrantes son su mercancía”, manifestó Solalinde.
Por ello exigió al gobierno federal proteger a los migrantes, “pues es su responsabilidad por los acuerdos internacionales en materia de derechos humanos que ha firmado, de brindar seguridad porque es un sector altamente vulnerable para los grupos delictivos que los explotan”.
Las personas lesionadas se identificaron con los nombres de Juana Velásquez Roque, de 36 años de edad, originaria de Cintalapa Chiapas, Pablo López Méndez de 20 años, de Tapachula Chiapas, y Francisco Javier Solórzano López, de 32 años, originario de Tapachula Chiapas. (Con información de Quadratín)