De Luis Miguel pueden decir lo que sea, y él nunca responde, ni hace caso, ni le importa, ni le preocupa. El cantante es de los más populares de habla hispana y ha vendido más de 100 millones de discos a lo largo de su carrera. Luis Miguel acaba de cumplir 44 años y actualmente está nominado a los premios Billboard como el mayor exponente de la Música Latina en la categoría de Gira del Año, por su Hits Tour, con la que recorrió España, México y Estados Unidos y logró 220 fechas totalmente abarrotadas a lo largo de dos años.

 

Además, establecerá un récord en Las Vegas, por ser el primero en presentarse por octavo año consecutivo durante las fiestas patrias, en el mes de septiembre.

 

De su vida se ha dicho todo y él no pierde el tiempo en aclaraciones, lo único que hace, es aparecer de vez en cuando en público y se deja ver con la novia en turno, cuando no quiere ser observado, simplemente se esconde.

 

De hecho, sabe manejar el misterio. El cantante hace que sus empleados firmen un contrato de confidencialidad para prohibir que hablen de lo que hace. Se sabe que el nombre de Luis Miguel lo tiene registrado y es una marca, así que quien lo utilice en público puede ser demandado por el cantante, por eso Aracely siempre se refiere a él como “mi ex, la persona con la que estuve, el padre de mis hijos, el Sol”, etcétera; pero si se fijan: no pronuncia su nombre, pues sabe que puede meterse en líos.

 

A Luis Miguel le da risa todo lo que se dice en torno a él, pero se da cuenta que todo eso le sirve de publicidad y por eso jamás hace comentario alguno, simplemente no se ocupa de desmentir notas, y es notorio que cada vez da menos entrevistas, porque siente que no las necesita; y la prueba está en que, lugar a donde se presenta, siempre está lleno.

 

Así que Luis Miguel y Juan Gabriel son de los pocos que se pueden dar el lujo de despreciar a la prensa, pues su fama rebasa las fronteras de la publicidad y sin grandes anuncios logran abarrotar los sitios donde se presentan. Así que él aplica el dicho: Que hablen de mí, aunque sea bien.

 

Hay más…..pero hasta ahí les cuento.