El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, reconoció hoy que todavía quedan tensiones entre su gobierno y el de la canciller alemana, Angela Merkel, respecto al espionaje de la Agencia de Seguridad Nacional (NSA), por lo que ambos países planean abrir un “ciberdiálogo” bilateral para solventar sus diferencias.
En una conferencia de prensa tras reunirse en la Casa Blanca durante dos horas con Merkel, Obama pareció cerrar la puerta a la posibilidad de acordar un tratado de no espionaje mutuo con Alemania, como quiere el gobierno alemán.
“No es correcto decir que el Gobierno estadounidense ofreciera un acuerdo de no espionaje (a Alemania) y después retirara esa oferta”, corrigió Obama a un periodista alemán durante la conferencia de prensa. “No tenemos ningún acuerdo de no espionaje como tal con ningún país, con ninguno de nuestros aliados más cercanos”, agregó.
“Lo que estamos haciendo con los alemanes, como con los franceses, los británicos o los canadienses, es revisar cuáles son exactamente las reglas que gobiernan la relación con cada país y asegurarnos de que no hay malentendidos”, agregó Obama.
El mandatario precisó que ha propuesto a Merkel abrir un “ciberdiálogo estadounidense-alemán para cubrir las brechas que puedan seguir existiendo en términos de cómo operamos, cómo opera la inteligencia alemana, y asegurarnos de que hay transparencia respecto a lo que estamos haciendo y qué intenciones tenemos”.
Merkel confirmó que Alemania y EU “van a entrar en ese ciberdiálogo”, que servirá como “un foro para tener conversaciones algo más largas sobre en qué punto estamos individualmente, cuáles son las posibilidades técnicas, pero también (explicar) las ramificaciones de nuestros avances tecnológicos”.
La revelación el pasado octubre de que un teléfono móvil de Merkel fue intervenido por la Inteligencia estadounidense entre 2002 y 2012 irritó tremendamente al gobierno alemán, que llegó a amenazar a EU con la expulsión de diplomáticos y más tarde trató de convencer a Washington de firmar un tratado de no espionaje mutuo.
“Todavía tenemos algunas dificultades que superar”, indicó hoy Merkel, pero confió en que hay “posibilidades” de resolver esas diferencias “a medio y largo plazo”.