La Comisión Investigadora de la Asamblea Legislativa se pronunció porque el Consorcio Constructor de la Línea 12 del Metro se encargue de las reparaciones, luego de que conoció el informe preliminar de análisis sobre los problemas detectados en ella.
El titular de la comisión, Jorge Gaviño, señaló que sería una buena señal, positiva y de conciliación, si el consorcio y no una empresa ajena se encarga de las reparaciones, aunque aclaró que eso es independiente de las responsabilidades que cada parte deberá asumir.
Si resulta que hay responsabilidad del consorcio, ni siquiera sería necesario pagar por el costo de las reparaciones, y de no tener responsabilidad, de todas formas es mejor que ellos se encarguen y no una empresa ajena que no conoce la obra, argumentó.
El informe preliminar que elaboró la empresa francesa SYSTRA y que recibió la comisión y se hizo público por los diputados locales, no precisa responsables de las fallas, pero sugiere las medidas correctivas que son necesarias para rehabilitar la línea.
Gaviño Ambriz precisó que la empresa francesa deberá entregar una segunda parte del informe de diagnóstico que incluya los resultados de laboratorio, y sólo entonces se podrán deslindar responsabilidades con bases sólidas.
Por lo pronto, dijo que el informe preliminar es congruente con lo que han encontrado los propios asambleístas y sus asesores, pues destaca la falta de mantenimiento adecuado, como una de las razones principales de los problemas que obligaron al cierre de la línea.
Añadió que hay coincidencia en la necesidad de tener una cronología de la aparición de los desgastes y de las decisiones de todos los involucrados, es decir de empresas y de entidades de gobierno.
Por el momento, el presidente de la Comisión Investigadora dijo que únicamente se puede hablar de “tramos de responsabilidad”, aunque al final corresponderá a las autoridades competentes, como a la Contraloría General y a la Consejería Jurídica decidir si hay responsabilidades que reclamar.
El informe preliminar dado a conocer por los diputados advierte que antes de iniciar las acciones de rehabilitación es necesario identificar el origen de las fallas, pues de lo contrario se corre el riesgo de que vuelvan a aparecer.
En el documento se señala que la distancia de separación mínima de 45 milímetros reduce algunos milímetros la longitud de apoyo del contra riel sobre su soporte, dejando poca superficie de soporte, y con la auditoría final se conocerán los defectos de los durmientes y la causa de sus rupturas, fisuras longitudinales y transversales.
Los durmientes rotos no cumplen con la función de dar estabilidad al riel y mantener el eje de los trenes, dice el informe, y revela que se encontraron defectos en el material de balastro, el cual está contaminado con arcilla, además de que tiene mala granulación.
Añade que en los aparatos de vía y en las agujas se detectaron despostillados, y que se realizaron pruebas para conocer si hay compatibilidad entre la rueda y el riel, las cuales no han concluido.
El informe final deberá incluir los resultados de la revisión de la vía férrea, material rodante, obras y mantenimiento del tramo suspendido de la Línea 12 y de los resultados del plan de acción para su rehabilitación.
El informe preliminar adelantó que SYSTRA, basándose en la identificación del origen de los defectos que se fueron conociendo como de concepción, de realización o de mantenimiento, formulará un conjunto de recomendaciones.
Explica asimismo que en el análisis se incluirán los subsistemas catenarios y aparatos que pueden ser fuertemente impactados por las modificaciones al nivel de la vía.
Añade que el análisis de la vía férrea es sólo en el viaducto elevado, principalmente en el tramo donde hay curvas menores a 800 metros, y que es donde el desgaste ondulatorio se presentó como un problema evidente.