WASHINGTON. El Producto Interior Bruto (PIB) de Estados Unidos se contrajo un 1 por ciento en tasa anualizada en el primer trimestre por primera vez en tres años, según datos divulgados hoy por el gobierno de Washington.

 

La contracción, ligeramente superior a la esperada por los expertos, difiere mucho de los datos avanzados por el Departamento de Comercio, según los cuales el PIB había crecido entre enero y marzo una décima.

 

La contracción se da después de tres años de crecimientos trimestrales continuados y de que en el cuarto trimestre de 2013 el PIB se incrementara en un 2.6 por ciento.

 

El crudo invierno por el que ha pasado Estados Unidos ha pesado en el consumo, equivalente a un tercio del PIB, a lo que se ha sumado la caída de las exportaciones y de la inversión en el sector privado.

 

Los mercados esperaban la contracción en este dato revisado, que incorpora al cálculo más indicadores, y consideran que la economía estadounidense volverá a repuntar con fuerza en el segundo trimestre del año.

 

La gobernadora de la Reserva Federal, Janet Yellen, ya dijo a comienzos de este mes que el PIB estadounidense caería en el primer trimestre del año, que las causas son principalmente “factores transitorios” y adelantó que el gasto de los consumidores y la producción industrial ayudaran a un repunte.

 

Según el informe del PIB publicado hoy, la caída “refleja el frenazo en las exportaciones, una caída mayor de inventarios, en inversiones fijas no residenciales y en el gasto de estatal y local, que superó al aumento del gasto a nivel federal”.

 

El consumo privado siguió creciendo entre enero y marzo, aunque a un 3.1 por ciento, por debajo del 3 .3 por ciento del último trimestre de 2013.

 

Las inversiones fijas (como en el caso de nuevas fábricas y equipos) se redujeron un 1.6 por ciento, algo que contrasta con el aumento del 5.7 por ciento del trimestre previo.

 

Las exportaciones cayeron un 6 por ciento, por debajo del incremento del 9.5 por ciento del dato de octubre a diciembre de 2013.

 

Todos estos retrocesos motivaron esta caída en esta revisión del PIB para la primera economía mundial, que desde mediados del año ha crecido de manera consistente y sólida y no registraba un trimestre negativo desde la caída del 1.3 por ciento del período enero-marzo de 2011.