La Agencia de Seguridad Nacional (NSA por sus siglas en inglés) está cosechando un gran número de imágenes de personas de las redes que intercepta a través de sus operaciones mundiales de vigilancia para su uso en programas de reconocimiento facial sofisticados, de acuerdo con documentos de alto secreto.

 

La dependencia de la agencia de espionaje en la tecnología de reconocimiento facial ha crecido significativamente en los últimos cuatro años al mismo tiempo que se ha convertido en un nuevo software para aprovechar la avalancha de imágenes incluidas en los correos electrónicos, mensajes de texto, redes sociales, videoconferencias y otras comunicaciones, revelan los documentos de la NSA.

 

Funcionarios de la agencia creen que los avances tecnológicos podrían revolucionar la forma en que la NSA encuentra los objetivos de inteligencia de todo el mundo, así lo muestran los documentos.

 

Las ambiciones de la Agencia para esta capacidad altamente sensible y la escala de estos esfuerzos no han sido revelados hasta ahora.  Puesto en números que datan de 2011: la NSA intercepta “millones de imágenes cada día”, de las cuales más de 55, 000 son “imágenes de calidad par reconocimiento facial”. De eso hace ya tres años, por lo que las cantidades actuales podrían ser mucho mayores.

 

The New York Times  no ha publicado los documentos al completo (tan sólo una “inofensiva” parte), cita varios de los ejemplos que aparecen en las diapositivas de la agencia. “No sólo buscamos las comunicaciones tradicionales: estamos realizando una aproximación que explota digitalmente las pistas que un objetivo deja tras él en sus actividades habituales en la red para recopilar información biográfica y biométrica”, decía la NSA en un documento de 2010 que cita este diario.

 

Las imágenes proceden de un programa que la NSA posee, llamado Wellspring, que extrae las fotografías de emails y otras comunicaciones. También confían en otros programas de terceros, como PittPatt, perteneciente a Google,  para la identificación de quién sale en ellas.

 

Peroeste no es el único método. Los documentos muestran cómo utilizan diversas fuentes adicionales como capturas de videoconferencias interceptadas, información de pasajeros en vuelos, carnets de identidad de países extranjeros que viajan por la red y más.

 

Una portavoz de la NSA aseguró que la agencia no tiene acceso a las bases de datos estatales, donde se encuentran pasaportes y carnets de conducir, y se negó a confirmar o desmentir si recopilaban imágenes con origen en Facebook y otras redes sociales.