TEHERÁN. Las autoridades iraníes redujeron a 40, en vez de 48, la cifra de muertos en el accidente de avión registrado hoy en Teherán, tras comprobarse que varios de los pasajeros sobrevivieron, informaron a Efe fuentes oficiales aeroportuarias.

 

Según confirmó un portavoz aeroportuario, de los 40 pasajeros y ocho miembros de la tripulación que viajaban en el avión, 38 murieron en el acto y otros diez sufrieron heridas de diversa consideración y fueron trasladados al hospital, donde dos de ellos murieron poco más tarde.

 

De los ocho supervivientes -la mitad hombres y la otra mitad mujeres-, cinco son miembros de la misma familia, incluido un niño, según la agencia local ISNA, y dos se encuentran en estado de extrema gravedad.

 

Los muertos son todos iraníes, confirmaron a Efe fuentes diplomáticas en Teherán.

 

Diversos medios indican que también fueron heridas siete personas que pasaban por el lugar donde se estrelló la aeronave.

 

El aparato, un Antonov-140 de fabricación iraní (conocidos también como IRAN-140), se estrelló a las 09:18 hora local (05:48 GMT), minutos después de despegar, al sur del aeropuerto de Meharabad, cerca del estadio deportivo Azadí, en el sureste de Teherán.

 

“El avión se estrelló en el bulevar número seis del complejo habitado Azadí. No tenemos informaciones exactas sobre las causas del accidente”, declaró el portavoz de la Media Luna Roja, Hosein Derajshan a la agencia nacional de noticias iraní IRNA.

 

Pertenecía a una aerolínea local iraní y volaba desde Teherán a la ciudad de Tabas, en una zona desértica en el este del país, cuando poco después del despegue se le paró uno de sus motores, según las primeras informaciones.

 

Irán cuenta con una flota aérea obsoleta y lleva varios años enfrentándose a grandes dificultades para encontrar piezas de repuesto debido a las sanciones internacionales, lo que suele ocasionar graves retrasos en los vuelos internos.

 

El último accidente grave tuvo lugar en enero de 2011, cuando un avión comercial se estrelló mientras trataba de hacer un aterrizaje de emergencia durante una tormenta de nieve en el norte de Irán, lo que provocó la muerte de 77 personas, informó la cadena estatal de noticias Press TV.

 

En julio de 2009, otras 168 personas murieron al chocar otro aparato en el noroeste del país tras despegar de la capital.