Con un Zócalo abarrotado, el líder nacional del Movimiento Regeneración Nacional (Morena), Andrés Manuel López Obrador, arrancó su asamblea deslindándose del gobernador con licencia de Guerrero, Ángel Aguirre, y del exalcalde de Iguala, José Luis Abarca, este último señalado por ser el responsable de la desaparición de 43 normalistas y el asesinato de seis personas.
“En las asambleas estatales, fui cuando menos tres veces a Iguala y nunca jamás lo vi (a José Luis Abarca). Nunca me buscó y también voy a decirles que tampoco establecí relación de complicidad con el ex gobernador de Guerrero”, declaró a sus seguidores desde el templete instalado frente a Palacio Nacional.
En la Asamblea de Morena, López Obrador aclaró que en 2010 condicionó su apoyo al entonces candidato a la gubernatura de Guerrero, Ángel Aguirre; sin embargo el perredista no aceptó los términos de un documento que contenía compromisos para becas estudiantiles y apoyos a adultos mayores, por lo que no se consumó el espaldarazo del político tabasqueño.
Sin embargo, el tabasqueño evitó hablar del promotor de Morena en Guerrero, Lázaro Mazón Alonso, quien ha sido señalado de haber apadrinado a Abarca para llegar a la presidencia municipal e incluso ya ha declarado ante la Procuraduría General de la República (PGR) por sus nexos con el ahora ex edil, prófugo de la justicia por ser el autor intelectual de la desaparición de los 43 estudiantes el 26 de septiembre pasado.
Mazón Alonso, también es señalado de negociar puestos para su familia, pues su hermano, Luis, es actualmente el suplente de José Luis Abraca en la presidencia municipal de Iguala; mientras que su hermana, Fabiola, fungía como titular de la Secretaría de Desarrollo Social de la localidad, pero renunció en septiembre por diferencias internas.
Pide renuncia de Peña
Durante la asamblea nacional de Morena, ante miles de simpatizantes, el dos veces candidato presidencial puso a consideración de los asistentes el rumbo de su lucha por el petróleo, así como exigir la localización de los 43 normalistas de Ayotzinapa.
En un mensaje de casi 45 minutos, el tabasqueño exigió por segunda vez la renuncia de Enrique Peña Nieto a la Presidencia de México, para darle paso a elecciones anticipadas para elegir a un nuevo titular del Ejecutivo federal.
Asimismo, propuso crear una Comisión de la Verdad en el caso Ayotzinapa, integrada por personas honorables y desligadas del gobierno como la escritora Elena Poniatowska, Rosario Ibarra y el padre Alejandro Solalinde.
Finalmente, pidió a los seguidores de Morena participar en todos los actos de protesta pacífica y sin violencia para pedir justicia por los normalistas desaparecidos hasta que sean encontrados con vida.
Hay Poniatowska para rato
En medio de un discurso conmovedor por los normalistas desaparecidos, la escritora Elena Poniatowska tuvo que frenar sus palabras por un desvanecimiento que sufrió a causa de la temperatura de casi 40 grados en la Ciudad de México.
“Los estudiantes de Ayotzinapa fueron cazados, sometidos a torturas hasta la muerte”, fueron las primeras palabras de la escritora de 82 años de edad al tomar el micrófono en el mitin de Morena.
“Le decían el Komander por su parecido con el cantante”, dijo Poniatowska al detallar los rasgos de uno de los 43 desaparecidos en Iguala; “otro era desmadroso, pero todos querían estudiar para llegar a ser maestros normalistas”, leía.
La activista alcanzó a dar los nombres de los 43 desaparecidos y no pudo seguir más, se alejó del micrófono, camino unos pasos hacía los invitados especiales al mitin y se desvaneció.
Al momento que la atendían, una de las dirigentes de Morena, Claudia Sheinbaum, tomó la palabra y aseguró: “Elenita está bien, ya es atendida, tenemos Elenita para rato”.
Sin aceptar auxilio de una ambulancia, Poniatowska se mantuvo en el templete y se retiró como todos los invitados, al finalizar el discurso de Andrés Manuel López Obrador.