BOCA DEL RÍO. América Latina busca una relación más “simétrica” con España y Portugal para convertir a la Cumbre Iberoamericana de jefes de estado en una comunidad de naciones que promuevan la cooperación en materia cultural y educativa, afirmó Rebeca Grynspan titular de la Secretaría General Iberoamericana (Segib), durante la inauguración del cónclave.

 

“En el 91 eramos solo cumbre, conducimos la Segib nos convertimos en conferencia, hoy tenemos la oportunidad de convertirnos en una comunidad de 22 países, una comunidad donde los miembros se relacionan entre sí”, sostuvo.

 

El tema central durante inauguración fue la educación pero el llamado general fue a fortalecer lazos. “Con visión e inteligencia, y con realismo y pragmatismo, debemos sacar el mejor partido a nuestras afinidades”, recalcó el rey Felipe VI, quien llamó a “trabajar juntos” en todos los ámbitos (político, económico, cultural, social, educativo y científico) “hasta donde sea posible”.

 

Impulso a la educación 

 

Los mandatarios de América Latina enfatizaron la urgencia de mejorar las necesidades en materia educativa de su población, para adaptarse a los cambios económicos en la región, con la baja en los precios de las materias primas.

 

El presidente Enrique Peña Nieto manifestó su confianza en que los 22 países miembros alcancen la meta de proporcionar 200 mil becas para educación superior para el año 2020, que permitan a los jóvenes estudiar en el espacio iberoamericano.

 

“También debemos fortalecer los vínculos entre nuestras universidades, centros de investigación, empresas y gobiernos, para generar un crecimiento compartido y sostenido”

 

Además, el presidente de México declaró que la cumbre tiene la intención de promover la innovación en la región.

 

La presidenta de Chile, Michelle Bachelet, advirtió que se acercan cambios fundamentales en América Latina, que pasará de depender menos en la extracción de recursos naturales, “y cada vez más a las capacidades y habilidades de las personas para aportar creativamente al desarrollo”.

 

“Nuestra región había estado en tasas de crecimiento extraordinario con lo que estuvimos muy felices y sentimos que teníamos varias capacidades productivas, pero era por que teníamos el viento a favor del precio de los ‘commodities’, y ahora con el viento en contra descubrimos que tenemos poca productividad por la falta de capital humano”, señaló.

 

Ollanta Humala, presidente de Perú, precisó que uno de cada cuatro jóvenes en la región no tiene la oportunidad de terminar estudios secundarios, “mientras que tres cuartas partes en países desarrollados tienen estudios de bachillerato”, precisó.

 

Por su parte, el mandatario de Ecuador, Rafael Correa, criticó las consecuencias de incentivar un modelo político alrededor de los intereses de mercado, lo que provoca una privatización del conocimiento.

 

La XXIV Cumbre Iberoamericana convocó a 16 jefes de Estado, incluido el presidente Enrique Peña Nieto, además del rey Felipe VI de España, una asistencia mayor a los 11 que asistieron el año pasado a Panamá. El presidente de El Salvador, Salvador Sánchez Cerén, se retiró por motivos de salud.