La Procuraduría General de Justicia del Distrito Federal (PGJDF) informó que se investiga a la empresa de seguridad privada CONPRYSSA, para conocer sus protocolos de actuación ante casos catalogados como de emergencia.
Además se investiga por qué tardó más de seis minutos en reportar el asalto a una tienda del Centro Comercial Santa Fe, ocurrido el viernes pasado, lo cual podría generar una sanción.
Por ello han sido citados a declarar empleados de CONPRYSSA que estuvieron en el lugar de los hechos, donde al menos 17 sujetos se apoderaron de relojes y joyas valuados en poco más de 1.2 millones de dólares.
El jefe de Gobierno del Distrito Federal, Miguel Ángel Mancera, ordenó que desde el sábado pasado 120 elementos armados de la Policía Bancaria e Industrial (PBI) reforzaran la vigilancia en esa plaza comercial.
Estos uniformados recorren los principales accesos, zonas de mayor manejo de valores, así como los estacionamientos, para garantizar la integridad de las personas que asisten a ese lugar.
Las indagatorias de la procuraduría capitalina establecieron que las camionetas en las que arribaron los presuntos responsables y que posteriormente abandonaron en el centro comercial ingresaron a México hace dos semanas por la frontera de Tamaulipas.
De igual forma, peritos y agentes de la Policía de Investigación analizan diversos videos de las cámaras de seguridad para establecer la identidad de los presuntos responsables.
Como resultado de esos trabajos ya se cuenta con perfiles fisonómicos de algunos integrantes del grupo de asaltantes que no portaban cubre boca, y se revisa si están relacionados con algún otro acto delictivo.
MG