JERUSALÉN. El primer ministro israelí Benjamin Netanyahu se declaró ganador en unas elecciones muy cerradas que parecían darle la ventaja en la contienda para formar al siguiente gobierno del país. Sin embargo, el líder opositor Isaac Herzog se negó a conceder la victoria.
En un comunicado difundido en Twitter, Netanyahu dijo que “contra todo pronóstico” su partido Likud y el bando nacionalista aseguraron una “gran victoria”.
Las primeras encuestas de salida mostraban que el Likud estaba empatado con la Unión Sionista, de centro izquierda.
Pero los resultados indicaban que Netanyahu tendrá una tarea más fácil para formar una coalición mayoritaria con aliados de línea dura y religiosos.
Netanyahu dijo que ya comenzó a llamar a potenciales socios.
Por su parte, Herzog dijo a sus partidarios que hará “todo esfuerzo” para conformar el siguiente gobierno de coalición.
Es posible que la decisión de formar una alianza recaiga en Moshe Kahlon, el líder de un nuevo partido de centro que podría aportar el apoyo necesario para asegurar una mayoría. Kahlon, cuya campaña política se enfocó en reducir el alto costo de vida en Israel, no ha manifestado su apoyo a ninguno de los dos candidatos.
Herzog dijo que ha hablado con posibles socios de coalición y se dijo comprometido a formar “un verdadero gobierno de reconciliación social”.
GH