El declive en la producción petrolera desaceleró la actividad industrial en general, que se ha mantenido a flote sólo por el repunte en las manufacturas y la construcción.
Las cifras del Instituto Nacional de Estadística, Geografía e Informática (Inegi) muestran que la industria petrolera del país continuó con su declive en enero pasado al registrar una caída de 7.5%, lo que ayudó a desacelerar el crecimiento total de la industria, que repuntó apenas 0.8% respecto al mismo mes del año pasado.
El sector industrial registró dicho aumento sólo gracias a un crecimiento de 4.2% en la construcción, y de las manufacturas de 2.5%.
“La actividad industrial se encuentra en desaceleración desde diciembre pasado, principalmente por el descenso en las actividades extractivas -petróleo, gas y minerales-”, dijo a 24 HORAS, Armando Rodríguez, analista sénior de Signum Research.
“La producción de hidrocarburos -actividad con mayor peso- se ha visto mermada especialmente desde hace dos años, además de experimentar la reciente caída en los precios, por lo que los industriales se encuentran a la expectativa de una recuperación con la reforma energética”.
Aun con el repunte que mostró, la industria manufacturera mexicana también resintió la caída en los precios del petróleo al reportar resultados a la baja en la fabricación de productos derivados de petróleo y la industria química, que cayeron 6.8% y 12.3% anual en enero respectivamente, luego de atravesar un 2014 con varias meses negativos en estos apartados.
La industria manufacturera del país logró compensar estos descensos por la recuperación del consumo en Estados Unidos y ocasionó un alza en el sector manufacturero de alimentos, bebidas, tabaco, madera, papel, plásticos, productos de minerales no metálicos, metálicos, maquinaria, electrónicos y equipos de computación.
La construcción se recuperó en el componente de edificación y trabajos especializados en enero, luego de un aumento de 10% anual en inversión en maquinaria y equipo para proyectos residenciales en diciembre pasado.
Estas caídas tienen que ver con las cadenas productivas de los derivados del petróleo, ya que si el precio baja, arrastra a toda la cadena totalmente”, dijo, Oliver Ambía, director académico del Departamento de Finanzas del ITESM Santa Fe.
“Además existen otras variables como el consumo interno y el tipo de cambio que afecta a aquellas industrias que importan insumos y otras que se benefician cuando realizan exportan y realizan ventas en dólares”.
Las manufacturas lograron compensar estos descensos por la recuperación del consumo en Estados Unidos y ocasionó un alza en el sector manufacturero de alimentos, bebidas, tabaco, madera, papel, plásticos, productos de minerales nó metálicos, metálicos, maquinaria, electrónicos y equipos de computación.
La construcción se recuperó en el componente de edificación y trabajos especializados en enero, luego de un aumento de 10% anual en inversión en maquinaria y equipo para construcciones residenciales en diciembre pasado.
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