KANSAS CITY. Fue como si se detuviera en el aire a voluntad. Eduardo Herrera calculó, o más bien, conjuró al balón para que lo encontrase frente al arco de Paraguay. Ahí, suspendido sobre la cancha de los Jefes de Kansas City, esperó al esférico que viajaba desde la derecha, para empujarlo con la planta del pie hacia la caricia de la red. A veces una sola jugada vale por un partido completo.

 

Ocho minutos necesitó el delantero de los Pumas para hacer un gol con la selección nacional. Jugó seis minutos contra Ecuador en el primer duelo de esta pequeña gira de preparación del Tri. Y con dos minutos en la cancha en el partido en el que México enfrentó a Paraguay, le dio la victoria a su equipo 1-0 en un partido poco lúcido y francamente aburrido.

 

Pero, quedaron claras dos cosas. La selección tiene un grave problema en la defensa, al menos en esta que está jugando. Sin Rafael Márquez (y vámonos acostumbrando a eso) y Héctor Moreno, el equipo requiere mucho trabajo. Diego Reyes podrá recibir todos los minutos que quiera darle Miguel Herrera, pero si no tiene minutos en Portugal, no va a estar a la altura. Simple.

 

Melitón Hernández, el portero que debutó con el equipo sufrió por la falta de colocación de los defensas mexicanos. Dos veces quedó mal parado al tratar de salir a cubrir los increíbles huecos que con un equipo con mejores delanteros, habrían terminado en gol.

 

La otra cosa que está clara es que Jonathan fue por mucho el mejor jugador de México. Jugó en la media por izquierda y fue el que decidió el futbol del equipo. Se nota la facilidad que tiene de jugar para el compañero con mejores posibilidades, toca fácil, sale de cualquier aprieto y sabe dónde están todos.

 

Otro que claramente está fuera de ritmo es el delantero del Atlético de Madrid Raúl Jiménez, quien no atinó una, no hizo un remate peligroso y dejó ir la jugada que pudo terminar en el 2-0 cuando tuvo un balón filtrado por Jonathan Dos Santos que lo dejó con buena oportunidad. Y tuvo otra, encaró, llegó con control y tenía el pase claro para dejar sólo a Herrera. Pero trató de hacer él el gol, y no estuvo ni siquiera cerca.

 

Al final del partido El Piojo hizo cambios, entró Javier Hernández por Herrera, también entró Giovani, pero la selección no tuvo más claridad en lo que fue uno de los últimos ensayos antes de la Copa de Oro de la Concacaf a mediados de año, torneo en el que se jugará la mitad de la clasificación a la Copa Confederaciones de Rusia en 2017.