En el marco de la XI #AccionGlobalporAyotzinpa en el Laberinto Cultural Santama se proyecta el documental Un día en Ayotzinapa 43 del director mexicano Rafael Rangel.
“Mientras ocurrió esa tragedia estaba en Los Ángeles haciendo un trabajo sobre unos fotógrafos y cuando vi la imagen de un estudiante desollado reuní a mi equipo y decidí viajar para documentar lo que estaba ocurriendo. Como puede ser que esto ocurra en mi país”, señala el realizador de cine de ficción.
Ernesto, uno de los sobrevivientes del atentado del 26 de septiembre, que es uno de los protagonistas de la cinta habla sobre sus sueños futuros:
“Que me gustaría enseñar. A mis alumnos que sean críticos y analíticos, que pregunten porque a los adultos, que cuestionen. ¿Cómo me veo? Con mi licenciatura terminada, casado y con trabajo a donde me manden. Me gustaría una comunidad pequeña que es donde se puede hacer más”, aseguró el normalista.
En tanto Michelle Solano, autora de la canción Un grito de guerra, que se vende en tiendas digitales de Apple y Google para reunir recursos de los padres de los 43 desaparecidos, narra que a ella le interesó sumarse desde el arte y la canción de protesta partir de las movilizaciones.
“Un grito de guerra se gestó para responder preguntas a mi hijo por Atenco” dice Michelle quien fue detenida en aquel movimiento.
Asimismo, Solano lamentó que grandes rockstars no se hayan sumado a grabar la canción que regaló a los padres de los normalistas para que sus regalías los ayuden a reunir fondos para su caravana.
Invitó a los asistentes a comprar la rola que tiene un precio de 12 pesos o escucharla por Spotify para ayudar a las familias a que esta lucha no se quede en el olvido.