Ayer, Carlos Navarrete se ufanaba de una mejoría del PRD de cara a las elecciones, aunque es un hecho que la escisión de Morena les ha pegado. Donde parece tener razón el líder del sol azteca es en la campaña de Silvano Aureoles, que más allá de lo que digan los sondeos sigue sumando apoyos a su candidatura a gobernador. Si el fin de semana se sumó a su campaña un grupo de panistas, de la corriente calderonista, por cierto, ayer recibió un espaldarazo implícito en un encuentro privado con Cuauhtémoc Cárdenas, quien si bien ya no es perredista, sigue teniendo un gran peso político.
Hablando de Felipe Calderón y su grupo, siguen movilizándose por todo el país. Y no sólo es el ex mandatario quien ha roto la tradición de silencio de los ex presidentes mexicanos, que se retiraban de la actividad pública, sino que su esposa, la ex primera dama Margarita Zavala se ha sumado sin restricciones a las campañas panistas; ayer, por ejemplo, estuvo en Guanajuato. El apoyo de la ex pareja presidencial ha contribuido a la estrategia del blanquiazul, pero a la par sirve para posicionar a Zavala, quien no ha desistido de contender por la presidencia del PAN.
Las elecciones intermedias en México se han tomado como punto de referencia para realizar cambios en el primer círculo del presidente en turno, sobre todo de cara a la sucesión presidencial. La actual administración no está exenta. En los corrillos de la política ya suenan nombres para la siguiente tanda de relevos: Miguel Ángel Osorio Chong, Emilio Chuayffet y Aurelio Nuño. Incluso, en la lista de los que entrarían al quite han puesto al rector de la UNAM, José Narro Robles, que concluye su gestión al frente de la máxima casa de estudios en noviembre próximo.
El siguiente gran impulso comercial para México podría venir de Centroamérica. No sólo Panamá trabaja para la ampliación de su canal, que tras 100 años de funcionamiento se ha visto rebasado, sino que Nicaragua va muy en serio con la construcción de otro canal interoceánico, que contaría con recursos chinos. Lejos de verlo como competencia, los navieros mercantes mexicanos ven un nicho de oportunidad para incrementar sus operaciones, principalmente en puertos como el de Lázaro Cárdenas, Michoacán, y el de Veracruz, para beneplácito de la SCT, que encabeza Gerardo Ruiz Esparza.
