Dicen los agroyuppies que quien está llevando a cabo el proceso de descomposición, perdón, de recomposición en la Sagarpa y sus organismos desconcentrados es el oficial mayor de esa dependencia, Marcos Bucio, quien para aquéllos es el verdadero secretario de Agricultura.
La mencionada recomposición inició en julio del año pasado cuando Bucio le dio cuello al entonces titular del Órgano de Control Interno (OIC), Salvador Esquer, porque éste denunció algunos “chanchullos” en la adquisición de un barquito de investigación oceanográfica llamado BIPO I, que nada más costó 300 millones de pesos. En lugar de Esquer pusieron a un contralor a modo de nombre Francisco Cárdenas Elizondo.
En esa misma ocasión, a sugerencia de Marcos, cambiaron al titular del OIC de Conapesca, y pusieron a otro contralor a modo de nombre José Antonio Bañuelos Hernández para que tapara la inmundicia de la Sagarpa.
En diciembre del año pasado, el Oficial Mayor le pidió la renuncia al director de Inapesca, Raúl Romo. Como éste no le hizo caso, aquél le pidió a su secretario Enrique Martínez y Martínez que le “apretara las tuercas” Siguiendo la instrucción don Enrique citó a Romo y lo sentenció a presentar su renuncia con fecha 31 de diciembre porque querían licitar la adquisición de otro barquito, el BIPO II, y no querían que “les hicieran olas”. Romo intentó rebelarse; no presentó la renuncia el día fijado, pero Bucio ordenó que lo quitaran de la nómina por órdenes superiores. El lugar de Romo lo ocupó Pablo Arenas Fuentes.
A principios de esta semana hubo relevo en Apoyos y Servicios a la Comercialización y Desarrollo de Mercados Agropecuarios (Aserca), otro organismo desconcentrado de la Sagarpa, donde designaron a Alejandro Vázquez Salido como director en jefe. De mercados agropecuarios “Alex” no sabe nada, pero dicen que es “buen muchacho” y que tiene experiencia financiera. El miércoles, el Fideicomiso de Riesgo Compartido (Firco) estrenó director general, luego de que Ignacio Diego, muy cercano a Enrique Martínez, renunció. Dicen los amigos de Nacho que éste se fue antes de que lo empezara a salpicar la inmundicia.
En un descuido Bucio podría “darle cuello” a su secretario, comentan los malosos. ¿Será?
Y ya entrados en el tema agropecuario, ayer el secretario de Economía y el de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación, Enrique Martínez, en conjunto con los ministros de Comercio Internacional y de Agricultura de Canadá informaron sobre los pasos a seguir ante la OMC, en contra de la medida de Etiquetado de País de Origen (COOL, por sus siglas en inglés) de Estados Unidos, recordando lo siguiente:
“El 18 de mayo, una vez más, la OMC confirmó la posición que México y Canadá han mantenido respecto a los requisitos de COOL para carne de ganado bovino y porcino, como una medida discriminatoria y que representa una violación de Estados Unidos a sus obligaciones comerciales internacionales.
La medida modificada de COOL, la cual ocasiona que el ganado mexicano y canadiense y sus productos cárnicos sean segregados de aquellos de origen estadounidense, afecta la cadena productiva de América del Norte y perjudica a los productores y procesadores de los tres países. Como resultado de la decisión final de la OMC y debido a que esta medida evidentemente proteccionista continúa vigente, nuestros gobiernos solicitan una reunión extraordinaria del Órgano de Solución de Diferencias el próximo 17 de junio, con objeto de obtener autorización para suspender beneficios en contra de Estados Unidos. Canadá solicitará autorización a la OMC para imponer una suspensión de beneficios en contra de Estados Unidos por un monto de 3 mil millones de dólares canadienses; mientras que México buscará una autorización por un monto de 653 millones de dólares estadounidenses. Seguiremos solicitando a Estados Unidos derogar la legislación sobre COOL para carne de ganado bovino y porcino y cumplir con sus obligaciones internacionales”.
Ante estas amenazas nuestros principales socios comerciales se tiraron al suelo… pero de la risa.