LONDRES. Standard & Poor’s advirtió este viernes que podría bajar la calificación crediticia a Gran Bretaña en algún momento de los próximos dos años luego de la decisión del gobierno de someter a referendo la permanencia del país en la Unión Europea.
Esa consulta popular, prevista para antes de que concluya 2017, “entraña un riesgo para las perspectivas de crecimiento de los servicios financieros y el sector exportador, así como para la economía en general de Gran Bretaña”, indicó la agencia en un comunicado.
Las políticas económicas “podrían estar en riesgo de quedar más expuestas a las políticas partidistas de lo que habíamos anticipado, similar a la situación en Estados Unidos cuando redujimos en 2011 esa calificación de la deuda soberana”, agregó.
En consecuencia, la S&P consideró que la calificación AAA de Gran Bretaña enfrenta una perspectiva negativa. Eso significa básicamente que existe una entre tres probabilidades de que dicha calificación sea disminuida en los próximos dos años.
El gobierno conservador británico elegido recientemente anunció que a finales de 2017 se decidirá mediante referendo la permanencia de Gran Bretaña en la Unión Europea, luego de un proceso de renegociación en el que Londres busca que sus socios le hagan concesiones, como restricciones a las prestaciones sociales que los inmigrantes del bloque puedan reclamar.
El primer ministro David Cameron sólo tiene una escasa mayoría en la Cámara de los Comunes y deberá proceder con cuidado antes del referendo, ya que muchos de sus correligionarios en el Partido Conservador probablemente votarán para que Gran Bretaña abandone la UE.
Fuera del Parlamento, Cameron también enfrentará una campaña concertada a favor de la salida de la Unión Europea orquestada por el Partido de la Independencia del Reino Unido, que captó 12,5% de los votos en la reciente elección pero que sólo obtuvo una banca.
Durante muchos años, la UE ha sido motivo de controversia entre los británicos debido a que muchas personas en el país la culpan de los elevados niveles de inmigración, el estancamiento económico y los bajos sueldos.
Otros piensan que el ser miembros les ha traído grandes beneficios a los británicos, sobre todo porque pertenecer a ella ofrece acceso al mercado único más lucrativo del mundo.
Las encuestas de opinión dejan entrever que Gran Bretaña votará a favor de permanecer en el bloque europeo independientemente de lo que Cameron logre negociar.
Sin embargo, el reciente referendo sobre la independencia de Escocia y la sorpresiva victoria electoral de los conservadores son una muestra de cómo las encuestas de opinión pueden cambiar, o de plano estar totalmente equivocadas.
Para S&P está claro el rumbo que debería tomar el país en el referendo.
“Gran Bretaña se ha beneficiado de su economía flexible y abierta, que a nuestro juicio ha prosperado dentro de la UE”, agregó.